Estalla una discusión abierta y Putin se echa a un lado
En una reunión de la Unión Económica Euroasiática, celebrada cerca de San Petersburgo, se desató una fuerte trifulca entre dos de sus miembros más influyentes.
Durante el encuentro, el presidente bielorruso, Aleksandr Lukashenko, desvió abruptamente del guion previamente acordado, generando un momento tenso con el primer ministro armenio, Nikol Pashinyan, quien participaba de forma telemática debido a una infección por Covid-19.
Lukashenko, presidente de la Unión, exigió que Pashinyan estuviera presente físicamente en la próxima cumbre, que se celebrará en Bielorrusia. Sin embargo, el líder armenio rechazó la propuesta, señalando que prefería seguir participando de manera virtual.
Ante la negativa, Lukashenko no solo insistió en una explicación, sino que incluso ofreció enviar un avión de Bielorrusia para recoger a Pashinyan. A pesar de ello, el primer ministro armenio dejó claro que su país estaba distanciándose de Bielorrusia, debido al apoyo de Lukashenko a Azerbaiyán, el principal rival de Armenia en el Cáucaso.
La discusión continuó a pesar de los intentos de moderación de otros líderes presentes, como el propio Putin. En los últimos meses, Armenia ha buscado un acercamiento con Occidente, alejándose de la influencia tradicional de Moscú. Esto ha generado fricciones con Rusia, que ha advertido a Armenia sobre los peligros de seguir un "camino ucraniano" y ha dejado algunos interrogantes sobre la lealtad del país a la alianza euroasiática.
