Para qué sirve tomar proteínas después de entrenar y qué cantidad es la adecuada

Para qué sirve tomar proteínas después de entrenar y qué cantidad es la adecuada

No es lo mismo tomarlas antes que después de hacer deporte. 

Una mujer levanta una kettle en el gimnasioMiljan Lakic

Para la mayoría de personas que practican deporte o entrenan en el gimnasio con asiduidad es imprescindible consumir una ración suficiente de proteínas que les permita tener energía y mantener la masa muscular. 

Sin embargo, eso no significa tomar batidos de proteína sin control ni tampoco todas las personas tienen las mismas necesidades. Desde la web deportiva Runtastic, indican que después de entrenar lo ideal sería tomar unos 20 gramos de proteína para una buena absorción. 

Antes de lanzarse es bueno saber si interesa más consumir proteínas antes o después del entrenamiento, ya que no tienen las mismas funciones. Según la web de nutrición deportiva High Pro Nutrition, tomar proteína antes de hacer deporte es positivo si lo que se busca es ganar masa muscular, mientras que si se hace una vez ha terminado el entrenamiento será útil para recuperar los músculos y los tejidos tras la intensidad del ejercicio. 

Desde este portal, recomiendan consumir las proteínas entre una hora y dos horas tras terminar el entrenamiento, mientras que Runtastic señala que el mejor momento para ingerirlas es 20 minutos después de hacer deporte. 

Ante la duda, lo mejor es preguntar a un médico o a un entrenador personal sobre qué es lo mejor a nivel personal y en función de los objetivos que se quieran alcanzar. 

Además de tener claro en qué momento es más conveniente para cada uno tomar las proteínas, depende de la persona qué proteínas tomar. Desde Runtastic insisten en que los batidos y la suplementación pueden ser buenas opciones, pero siempre pautadas por un profesional sanitario. 

Lo más importante es seguir una dieta saludable, equilibrada y rica en proteínas que no solo pueden encontrarse en alimentos de origen vegetal sino en legumbres como los garbanzos, cereales como la avena u opciones veganas como el tofu.