Trump, que puede parar la guerra en Gaza y no lo hace, se queja de que nadie le agradece su "ayuda": "Te hace sentir un poco mal"

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este domingo que la situación en Gaza "es un desastre" y lamentó que nadie haya agradecido los 60 millones de dólares que su país ofreció en ayuda alimentaria. "Al menos esperarías que alguien diera las gracias", afirmó el mandatario en declaraciones a la prensa antes de iniciar una reunión en su complejo de golf de Turnberry, al oeste de Escocia, con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.

"Te hace sentir un poco mal cuando haces eso y otros países no dan nada", declaró Trump, pese a que multitud de Gobiernos, incluido el propio Reino Unido en el que se encontraba, mantienen su compromiso humanitario con la Franja. También llaman la atención esas declaraciones del líder de la mayor potencia del mundo, el mayor amigo de Israel, quien tiene el poder de parar al primer ministro, Benjamin Netanyahu, y no lo hace. Aún así, el republicano quiere que se le agradezca, cuando los muertos rondan los 60.000 y buena parte del armamento que se usa en esta guerra viene de su país, directamente. 

El presidente de EEUU afirmó que "es terrible" la situación de inanición en que se encuentran los niños gazatíes y lamentó que (el grupo islamista) "Hamás roba la comida y el dinero". "Ese lugar es un desastre", exclamó. Aunque esta es una realidad conocida, Trump no se refirió a los camiones con ayuda internacional que Israel se ha negado durante meses a dejar entrar en la franja. 6.000 camiones ha llegado a tener esperando Naciones Unidas. 

En relación a las conversaciones con Hamás para un alto el fuego, que Israel y Estados Unidos abandonaron al considerar que el grupo las obstaculiza al negarse a devolver rehenes, Trump dijo que el Gobierno israelí "deberá tomar una decisión". "Sé lo que yo haría pero creo que no es apropiado que lo diga", afirmó el dirigente republicano.

Trump opinó también que "Irán se está aprovechando" y se preguntó "cómo pueden ser tan estúpidos" de decir que continuarán con su proceso de desarrollo nuclear después que EEUU los bombardeara en junio.

El ruego de la ONU

Por su parte, la Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) dijo este domingo que agradece la decisión de Israel de permitir más ayuda humanitaria para Gaza, pero que se necesitan "acciones persistentes y rápidas" para aliviar la grave escasez de alimentos en la Franja.

En un comunicado, el secretario general adjunto de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios y coordinador de ayudas de emergencia, Tom Fletcher, recuerda que en Gaza "una de cada tres personas no ha comido hace días" y que la situación es "devastadora" y dice a su vez que acoge "con satisfacción la decisión de Israel de apoyar un aumento de la ayuda durante una semana".

Las medidas israelíes incluyen, según OCHA, el levantamiento de las barreras aduaneras para alimentos, medicamentos y combustible procedentes de Egipto y la designación de rutas seguras para los convoyes humanitarios de la ONU. Pero Fletcher sostiene que, pese a los avances, "hacen falta acciones persistentes y rápidas", incluyendo "autorizaciones más rápidas" para los convoyes en aduana.

También manifiesta que se necesitan "rutas seguras que eviten las zonas concurridas y no más ataques a las personas que se reúnen para buscar comida", en referencia a los ataques del ejército israelí en puntos de distribución de ayuda que se han cobrado más de 1.000 víctimas gazatíes desde mayo, según datos de la ONU.

Las fuerzas israelíes anunciaron el sábado que reanudarían el lanzamiento por aire de ayuda en medio de la creciente crisis humanitaria por la escasez de alimentos.

Durante el año pasado, Israel ya puso en marcha este método de entrega, que fue criticado por los organismos internacionales al considerar que pone en peligro la vida de los gazatíes.

De hecho, decenas de gazatíes fallecieron con el lanzamiento de algunos de estos palés, que derivaron en escenas de caos y estampidas.