El joven, de 29 años, asiste a una vista clave en su caso. Sancho, negó ser culpable del asesinato premeditado así como de hacer desaparecer su pasaporte.
Los agentes hallaron en el teléfono móvil del menor de 14 años, que tiene historial de enfermedad mental y había dejado de tomar la medicación, un vídeo de cómo practicaba para recargar el arma usada en el tiroteo en el lujoso Siam Paragon.
El sospechoso, ya detenido, es un varón que portaba una pistola y vestía pantalones de camuflaje cuando comenzó a abrir fuego en el lujoso Siam Paragon de la capital tailandesa.