PP y PSOE ponen coto a las reformas constitucionales más allá del artículo 49

PP y PSOE ponen coto a las reformas constitucionales más allá del artículo 49

La mayoría de ambas formaciones en la Mesa del Congreso les permite rechazar otras propuestas de PNV y formaciones insertadas en Sumar.

La presidenta del Congreso, Francina Armengol

El artículo 49 y ya. Uno de los temores de Alberto Núñez Feijóo cuando se puso de acuerdo con Pedro Sánchez no se cumplirá (al menos por ahora). La Mesa del Congreso, con la mayoría del PP y del PSOE, ha rechazado abrirse a otros cambios en la Constitución más allá de la supresión del término 'disminuidos' del citado artículo. 

La medida de la Mesa llega un día después de que la Cámara Baja (desplazada estas semanas, por obras, al Senado) aprobara por 315 votos a favor, las 33 abstenciones de Vox y ningún 'no' la tramitación de una reforma que busca eliminar un término despectivo, tal y como pactaron presidente del Gobierno y líder de la oposición. 

Aprovechando la ocasión, el PNV y Més per Mallorca y Compromís (ambas dentro del grupo Sumar) habían registrado otras enmiendas parciales referidas a asuntos como el derecho a decidir pactado del País Vasco, limitar la inviolabilidad del rey, modificar las funciones de las Fuerzas Armadas o eliminar el artículo 155 para su debate y votación, así como la recuperación del Derecho Civil Valenciano.

Sin embargo, la Mesa de la Cámara Baja esta vez no ha dado pie y no ha admitido estas enmiendas justificando que "no se ajustaban a la reforma del artículo concreto". Ante el bloqueo de PP y PSOE, los votos en sentido contrario de Sumar han sido inútiles.

Compromís ha señalado a EFE que recurrirá a la Mesa del Congreso esta decisión con un escrito de reconsideración y fuentes de la formación no descartan acudir a los tribunales. Por su parte el PNV ha lamentado que el PP y el PSOE no permitan dialogar "de manera sosegada" sobre otros artículos susceptibles de ser modificados, a través de un comunicado.

Poco después, Sumar ha reconocido que se plantea llevar ante el Tribunal Constitucional la decisión de la Mesa. "No tiene sentido ni político ni parlamentario", ha reprochado su portavoz adjunta, Àgueda Micó en una rueda de prensa.