Trump se declara "no culpable" de los 37 cargos en su contra por llevarse documentos clasificados de la Casa Blanca

Lo que hubiera sido algo histórico ahora parece una parada más en la cada vez más amplia historia judicial de Donald Trump. El expresidente de EEUU y precandidato a la reelección, ha pasado este martes por el banquillo del Tribunal Federal de Miami para declararse "no culpable" de los 37 cargos que se le imputan por llevarse documentos secretos de la Casa Blanca a su residencia de Mar-a-Lago.

Como marca el protocolo, el magnate ha sido arrestado a su llegada al edificio judicial. Sin salir de su coche, ha accedido a la Corte a través del garaje para evitar a la multitud de cámaras y simpatizante que llevaban horas esperándoles, con un gran revuelo en los alrededores. Antes de su declaración, Trump se ha sometido, también, a la toma de sus huellas dactilares. 

Y a la hora de la verdad, lo esperado en un breve paso ante el juez federal, Jonathan Goodman, que le ha leído los 37 cargos. Sin añadir más palabras, Trump se ha convertido en el primer presidente o expresidente en enfrentar cargos federales. De ellos, 31 corresponden al delito tipificado como retención deliberada de información de defensa nacional. 

Los restantes se engloban en conspiración para obstruir a la Justicia, ocultación de manera "corrupta" de un documento o registro, ocultación de un documento en una investigación federal, plan para ocultar y declaración y representación falsas.

Entre los 37 cargos hay varios considerados 'federales' por su especial gravedad. Según el documento de imputación de 49 páginas, los delitos de obstrucción a la Justicia y conspiración se castigan con hasta 20 años de cárcel, más allá de los 250.000 dólares de la potencial multa. Otros delitos, como la conspiración para ocultar esos documentos, podrían llegar a los 5 años entre rejas, más otra multa de igual cuantía.

Trump lo achaca todo a un intento de "interferencia electoral" de Biden y la Casa Blanca responde

Todo estos cargos provienen del registro practicado por agentes del FBI a su residencia en agosto de 2022, más de año y medio después de su salida de la Casa Blanca. En su operación, los agentes requisaron una importante cantidad de papeles y documentos de carácter confidencial. Según puntualiza EFE, los investigadores hallaron alrededor de 11.000 documentos oficiales, entre los cuales había un centenar catalogados como secretos o "ultrasecretos".

Entonces y ahora, Donald Trump mantiene su tesis de "caza de brujas" contra él, a lo que ahora añade su acusación, sin más pruebas que su rabia, de "interferencia electoral" contra Joe Biden dada su intención de aspirar de nuevo a la presidencia en 2024.

Por si acaso, desde la Casa Blanca han salido al paso. La portavoz del Gobierno estadounidense, Karine Jean-Pierre ha asegurado que "él [Biden] no ha estado involucrado. El presidente siempre ha sido muy, muy claro. El Departamento de Justicia es independiente". "Déjenlos hacer su trabajo", ha añadido poco después ante las preguntas de los periodistas.

La cuestión judicial, con varias causas abiertas contra el 45º presidente de EEUU y hasta una condena ya definitiva por abusos sexuales, no le inhabilitarían para llegar a la Casa Blanca. En cambio sí podrían dificultar mucho un camino en el que no se puede descartar que el magnate acabe incluso en la cárcel. De momento, le quedan muchos meses de pelea jurídica.