La retórica de los comentaristas rusos contra Kazajstán, tradicionalmente un aliado de Moscú, se ha intensificado después de que este país confirmó las sanciones occidentales contra el Kremlin tras la invasión de Ucrania.
EEUU ha advertido a sus aliados de que está proporcionando imágenes satelitales a Moscú para ayudarle en su invasión de Ucrania. La neutralidad que defiende Pekín en el conflicto quedaría rota.
Las sanciones internacionales no sólo hacen daño a Moscú, sino a sus aliados, que cada vez son menos propensos a mezclarse por si salen salpicados del castigo.
El fabricante alemán Meyer Burger espera ayudas públicas antes del fin de semana para evitar el cierre de una de las mayores fábricas de placas solares en Europa.