Rajoy convoca al embajador de EEUU para pedirle explicaciones por el espionaje de la NSA

Rajoy convoca al embajador de EEUU para pedirle explicaciones por el espionaje de la NSA

A Mariano Rajoy no le consta que millones de ciudadanos y políticos españoles hayan sido espiados por la NSA, la Agencia de Seguridad Nacional de EEUU.

"No tenemos constancia de que España haya sido espiada", ha asegurado en una rueda de prensa en Bruselas, donde asistió a la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea.

Rajoy ha pedido al ministro de Exteriores, José Manuel García-Margallo, que "convoque al embajador de EEUU con el objeto de recabar información sobre las noticias aparecidas en medios de comunicación al respecto".

Poco después, Exteriores ha informado de que la reunión entre el embajador James Costos y Margallo tendrá lugar el lunes a las 10:30.

"Las actuaciones de espionaje no son propias de las relaciones entre países socios y aliados", ha advertido Rajoy. Y España desea mantener las relaciones bilaterales con EEUU "lo más estrechas posibles".

"Yo en este momento no tengo la constancia que tiene la señora [Angela] Merkel", cuyo teléfono ha sido espiado, ha asegurado.

Esas informaciones, apoyadas en documentos filtrados por el exanalista Edward Snowden, apuntan a un seguimiento masivo de llamadas y SMS de millones de ciudadanos y hasta 35 líderes europeos, entre los que se encontrarían altos cargos del Gobierno español, según fuentes de El País.

En un comunicado, los líderes de los 28 países de la UE se han limitado a destacar que "la falta de confianza puede perjudicar la cooperación necesaria en el campo de la recopilación de [datos] de inteligencia".

La frase, que puede interpretarse como un muy diplomático toque de atención, se inscribe dentro del capítulo de la lucha contra el terrorismo, según el comunicado (disponible aquí en inglés).

El espionaje de EEUU ha orbitado en torno a una reunión sin grandes asuntos en la que el comunicado aparece como un anexo a las conclusiones. En él, los 28 líderes aseguran que la alianza entre EEUU y la UE "debe estar basada en el respeto y la confianza, incluyendo como preocupaciones el trabajo y la cooperación de los servicios secretos".