El papa en el Parlamento Europeo: el aplauso de Pablo Iglesias y el plante de Izquierda Plural

El papa en el Parlamento Europeo: el aplauso de Pablo Iglesias y el plante de Izquierda Plural

La intervención del papa Francisco en el Parlamento Europeo ha cosechado respuestas de todo tipo entre los partidos de izquierda en la Eurocámara. Mientras el eurodiputado Pablo Iglesias ha aplaudido su intervención, al tiempo que ha tuiteado algunos de sus mensajes, seis eurodiputados de Izquierda Plural han abandonado el hemiciclo porque consideran que en una institución pública "no caben sermones religiosos".

El papa argentino ha sido recibido en las puertas del Parlamento Europeo por el presidente de la institución, Martin Schulz, entre gran expectación de fieles, periodistas y personal de la Eurocámara. Es la primera vez que un papa visita la Eurocámara desde Juan Pablo II, que intervino ante el Parlamento y el Consejo de Europa en 1988. En las puertas del Parlamento se han habilitado pantallas gigantes para seguir su visita, incluídos los discursos dentro del hemiciclo europeo y el Consejo de Europa.

Pablo Iglesias ya había hablado sobre el papa. Fue en la entrevista que le hizo Jordi Évole para Salvados, cuando dijo: “Nunca imaginé que podría estar tan de acuerdo con un papa”.

Este martes Iglesias no ha dudado en celebrar las palabras de Jorge Bergoglio cuando "ha defendido los derechos humanos y sociales como base de la dignidad", o cuando critica el "burocratismo de la UE y las prácticas ostentosas de sus jefes", y así lo ha demostrado a través de su cuenta personal de Twitter. Según la periodista de la COPE Paloma García Ovejero, el líder de Podemos no solo ha aplaudido, sino que ha sido él quien ha arrancado las palmas.

Tras el discurso, Iglesias ha dicho que le "encantaría conocer a Jorge Bergoglio", "en el Vaticano o en Vallecas, donde fuera posible" y que seguro que estarían de acuerdo en muchas cosas". Iglesias, a diferencia de sus compañeros, no ha mencionado en absoluto la posición del papa sobre los derechos de las mujeres o los homosexuales.

Al contrario, ha subrayado y ha ensalzado las partes del discurso que le han entusiasmado: "Ha estado muy bien cuando ha señalado el burocratismo de las instituciones europeas y de la formas de vida ostentosas", explicó Iglesias, que alabó también que el papa se refiriese "al escándalo de poderes financieros y las multinacionales que están secuestrando la democracia". También le gustó, según ha dicho, que el papa defendiese que "la dignidad es incompatible con los que no cumplen los derechos sociales vinculados al trabajo y los derechos humanos".

OTROS EURODIPUTADOS DE PODEMOS LE CRITICAN

La compañera de partido de Pablo Iglesias en el Parlamento Europeo, Teresa Rodríguez, ha dejado de escuchar al papa, como ella misma ha relatado, cuando ha hablado sobre las mujeres y el aborto:

Otro eurodiputado de la formación, Pablo Echenique, ha resumido así los acuerdos y diferencias de Podemos con el papa:

Una eurodiputada del grupo de los Verdes, Ulrike Lunacek, y vicepresidenta del Parlamento Europeo ha aprovechado la visita papal para hacer activismo por los derechos LGTBI (Lesbianas, gais, transexuales, bisexuales e intersexuales) y ha entregado la bandera arcoiris al saludar a Francisco.

LA PROTESTA DE IZQUIERDA PLURAL

"Nos hemos salido porque entendemos que esto es una institución pública y aquí no caben sermones religiosos", ha explicado a Efe la portavoz del grupo Izquierda Plural, Marina Albiol, vestida con una camiseta que reivindica el derecho de las mujeres a decidir sobre el aborto.

"Entendemos que debe haber una separación entre las creencias religiosas y las instituciones públicas", según Albiol, que consideró "muy llamativo" que otros eurodiputados de grupos con vocación laica no se hayan sumado a la protesta, "sobre todo una falta de respeto a las millones de personas laicas y de otras confesiones", apuntó.

DEFENSA DE LA DIGNIDAD

El papa Francisco ha arrancado hasta siete ovaciones durante su discurso. En su intervención, Jorge Bergoglio se ha preguntado "qué dignidad podrá encontrar quien no tiene qué comer o el mínimo necesario para vivir del trabajo, que le otorga esa dignidad", al tiempo que ha enviado un "mensaje de esperanza y de aliento" a todos los ciudadanos europeos al defender que el proyecto político europeo debe poner de nuevo en el centro al hombre, que está dotado de "dignidad" y "trascendencia".

El líder del Vaticano ha advertido de que la "soledad", que enferma a Europa, se ha agudizado por la crisis económica y ha detallado "sus consecuencias dramáticas", que se ven, según ha dicho "particularmente en los ancianos, a menudo abandonados a su destino, como también en los jóvenes sin puntos de referencia y de oportunidades para el futuro; se ve igualmente en los numerosos pobres que pueblan nuestras ciudades y en los ojos perdidos de los inmigrantes que han venido aquí en busca de un futuro mejor".

"No se puede tolerar que el mar Mediterráneo se convierta en un gran cementerio", ha dicho precisamente en relación a las muertes de inmigrantes que tratan de alcanzar las costas europeas.

El papa ha avisado también a los eurodiputados del descontento ciudadano. "Ha ido creciendo la desconfianza de los ciudadanos respecto a instituciones consideradas distantes, dedicadas a establecer reglas que se sienten lejanas de la sensibilidad de cada pueblo, e incluso dañinas", ha señalado.