Los 16 días en que Madrid quiso ser la tumba del fascismo

Los 16 días en que Madrid quiso ser la tumba del fascismo

La muestra 'No pasarán', que se puede ver hasta el 1 de julio, homenajea a los ciudadanos que defendieron la capital en noviembre de 1936.

AYUNTAMIENTO DE MADRID

Madrid, noviembre de 1936, el gobierno de la República se traslada a Valencia mientras el bando nacionalista se acerca a la capital. En la calle Toledo cuelga un cartel enorme que reza: '¡No pasarán! El fascismo quiere conquistar Madrid. Madrid será la tumba del fascismo'. Empiezan dos semanas en las que miles de ciudadanos luchan por la defensa de la ciudad.

El Ayuntamiento de Madrid ha querido homenajear a esas personas que hace ocho décadas defendieron la ciudad del franquismo con la exposición No pasarán, 16 días. Madrid, que se podrá ver en la Sala de Bóvedas de La Casa de la Panadería hasta el 1 de julio. La muestra busca contar las historias vividas entre el 7 y el 23 de noviembre de 1936 por decenas madrileños anónimos que se convirtieron en la resistencia. Para ello, la exposición se organiza en 16 temas dedicados a cada día de la batalla, entre los que se encuentran Luchar, Fortificar, Bombardeos, Solidaridad y El otro Madrid.

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Organizada por la Oficina de Derechos Humanos y Memoria, la muestra cuenta con fotografías, manuscritos inéditos y carteles, entre los que se expone uno regalado por Barcelona. También se pueden ver archivos como un mensaje de Franco a los resistentes: "Si os sometéis sin resistencia y entregáis las armas, os prometo una justicia serena y si, por el contrario insistís en el error que empeña la lucha, no pueden calcularse las proporciones del castigo".

Fueron dos semanas de resistencia en las que murieron 273 personas y hubo más de 1.000 heridos, es por ello que Mauricio Valiente, promotor de la exposición, la define como "un espacio de tolerancia, paz, memoria y reconocimiento a todas las víctimas sin excepción".

Manuela Carmena y Ada Colau, alcaldesas de Madrid y Barcelona, fueron las encargadas de su inauguración el martes 3 de abril. En el acto recordaron la importancia de este hecho histórico: "Madrid no solamente en ese momento, como decía Ada, estaba manteniendo esa batalla por la democracia contra el fascismo, sino que además estaba manteniendo una batalla por la legalidad. Porque a veces se nos olvida quiénes fueron los rebeldes".