Jaime Altozano: "Despacito' empezó siendo una canción pop"

Jaime Altozano: "Despacito' empezó siendo una canción pop"

El productor de 26 años es uno de los 'youtubers' de referencia en el ámbito musical y uno de los colaboradores del 'talent' de TVE 'La mejor canción jamás cantada'.

Jaime Altozano

Productor musical, youtuber y ahora colaborador del programa de TVE La mejor canción jamás cantada. Jaime Altozano tiene solo 26 años, pero sus vídeos de análisis y teoría musical superan en algunos casos los dos millones de reproducciones en YouTube. El que más ha dado que hablar es el análisis que hizo del disco El Mal Querer de Rosalía, que llegó a compartir la cantante catalana.

Altozano se ha atrevido a analizar el himno de España y también el de la Unión Europea, basado en la novena sinfonía de Beethoven y ha animado a sus seguidores a hacer su propia versión de ambas composiciones. El joven madrileño asegura que la fama no le ha afectado y que sabe sobrellevar los haters. Y, aunque su base sea la música clásica, no se muerde la lengua ante ningún estilo musical.

En El HuffPost hablamos con él de estos últimos vídeos sobre este símbolo europeo, sobre la importancia de las próximas elecciones al Parlamento Europeo y de mucha música.

¿Cómo decidiste analizar el himno de la Unión Europea?

Me dijeron desde el Parlamento Europeo que existía mucho desconocimiento de los símbolos de la UE, la gente conoce la sinfonía de Beethoven por tocarla en clase con la flauta dulce y, de hecho, yo la escuché ahí la primera vez. La gente no sabe por qué es el himno, ni la historia que hay detrás de él.

Así que decidí explicarlo y, como ya había hecho el reto del himno de España, dije la hago con esta, que además es muy sencilla. Es Do, Re, Mi, Fa, Sol... El ritmo es muy machacón y da mucho juego. La gracia que tiene es que Beethoven la desarrolló en una sinfonía brutal. Aquí quise ver qué era capaz de hacer la gente con esta melodía.

¿Con cuál te quedarías de todas las versiones que recibiste en el reto?

Flipé con uno en el que iban apareciendo las primeras notas del himno de cada país en el orden en el que se unieron a la Unión Europea, dices "¡Madre mía, qué locura!". Pero si tuviese que quedarme con uno no podría, cada uno lo abordó desde su área de conocimiento y lo que realmente me impresiona es la forma en la que lo ha hecho cada uno.

Lo bueno es que es una melodía muy blanca y muy flexible. Más aún que el canon de Pachelbel, esta tiene algo especial. Las propuestas suenan reales, no a covers chungas. Desde el que hizo el estilo Broadway, al que hizo lo del martinete, los que la cantaron en alemán, los que hicieron un estilo vocal... Hay 327 versiones y las escuché todas porque si te dejas una quizás te deje la buenísima. Elegí 14 para acortar el vídeo.

¿Es Eurovisión representativo de los sonidos de la música europea?

Allí los artistas se están representando a sí mismos, más que a su país. No llevan música autóctona, ni siquiera música local mezclada con pop actual. No hay una gran identidad musical dentro del certamen, pero está bien que hubiese algo más de contexto musicológico de cada país. Lo que pasa es que entonces sería un poco chungo y se haría todos los años lo mismo (risas).

Bueno, podría haber un fenómeno tipo Rosalía, que mezcla música local con trap actual.

A mí su disco me fascinó porque me pareció una propuesta musical única y original. Merece pararse a escucharlo, te guste o no. En el análisis de El Mal Querer, me centro en la producción musical, es decir, armonías y arreglos. No me centro en las influencias flamencas porque no sé concretamente de ese área. Ella no habló tanto de la parte musical porque nunca le han dado pie. Luego comentó lo de que era una obra conceptual y de eso sí habló ella. Es más el fenómeno que la música en sí.

  5c8efb6a2300008900e868afJaime Altozano

¿Crees que toda la música actual es reguetón?

El reguetón ha sufrido un cambio radical. Cuando surgió era trap, a finales de los 90 y principios de los 2000 era el ritmo dembow y las letras eran crudas. Eran trap y rap durísimo, sin armonías, muy hablado, muy bruto... Lo que ha hecho es fusionarse con el pop y los cuatro acordes famosos. Han ido mezclándose y acaba saliendo Despacito. De hecho, era una canción pop al principio. Le quitas la base y es eso. Cogió una canción que ya estaba grabada con guitarras y batería y después la hizo reguetón.

¿No estamos demasiado expuestos al autotune?

A mí me encanta, son estímulos súpernormales. Hay cosas sintéticas que atraen al público más que lo orgánico. Por ejemplo, colocas los golpes de batería sobre una cuadrícula y lo mueves para que no parezca tan robótico y suene humano. Eso te parece más atractivo que alguien tocando la batería. Al final lo que escuchas es una melodía perfecta hecha con ordenador. Está tan humanizado que suena humano, pero es mejor. Lo mismo pasa con el cantante, que está muy afinado y la voz está compuesta de varias tomas, cada palabra la que mejor esté de cada una. Eso puede crear un monstruo, que se aplica hasta en directo. Se puede poner software en un altavoz.

El 'autotune' puede crear un monstruo"

¿Y en qué se diferencia eso del playback?

No está muy claro, pero es que cuando vas a ver a un cantante o un grupo en un concierto de 8.000 personas en la que estás viendo una pantalla, no está clara la diferencia. Aunque fuera un cantante haciendo un acústico con guitarra española, estás viéndolo a una distancia enorme.

¿Por qué le gusta tanto a la gente joven el trap?

Creo que hay una necesidad de ruptura con lo anterior constante que, en el caso del trap, se construye como algo más duro, más brusco y menos azucarado. La gente joven tiene la necesidad de identificarse con sus malas experiencias, algo diferente al estilo que haya en ese momento. Eso era el reguetón en Puerto Rico, lo que fue el rock, el punk... Después han pasado a ser mainstream al mezclarse con la música moderna y lo que es la producción del pop hasta el punto que hay rap en todas las canciones y perdió la esencia de denuncia social. Dentro de unos años, habrá que inventar otro género.

¿Cómo afecta a tu vida personal ser youtuber?

La verdad es que haciendo vídeos estoy en mi casa, en mi cama, en mi sofá... Tengo hasta uno en la ducha. Estás muy cerca de esa persona.

Lo más lejos que puedes estar de un famoso es verle anunciando algo en una marquesina, es como buscarle en Google Imágenes, pero con los youtubers se muestra en su casa, tal y como es, hablando de sus cosas. No hay maquilladores, ni estilistas. Si tengo un mal día o no sé vestir, me lo ves. Necesito hacer vídeos personales e íntimos, la gente me lo pide. Es raro estar todos los días en el salón de alguien y no saber nada de esa persona. Hay que ser honesto, sí que me paran por la calle desde que empecé en YouTube, con la tele en La mejor canción jamás cantada he notado el cambio en la audiencia. Publicaron un artículo en el¡Hola!, es curioso.

El 'trap' es la música con la que los jóvenes se sienten identificados"

¿Y la gente te trata de otra forma?

Cambia el público, el millenial si hablas de algo tuyo, lo va a ver. La generación anterior, si cuentas algo no le va a interesar, pero sí que lo cuenten otros. Hay muchísimas más cultura de paparazzi.

¿Cómo llevas los haters?

Todos los youtubers tienen estrategias porque tienes la caja de comentarios debajo, no es como la tele, que si no te metes en Twitter, no sabes qué dicen. Por ejemplo, yo miro las primeras horas y luego ya no. Porque primero llega la audiencia con buen rollo y luego ya se hace viral y la gente comenta mal, hay gente muy destructiva y tienes que tener cuidado para que no te afecte. No me meto en foros ni en lo que hablan mal de mí, pero sé que hay críticas.

Entre el hate hay comentarios constructivos, críticas buenas, así que suelo pedir que alguien lo lea por mí entre los insultos.

¿Cómo te afecta la directiva de la Unión Europea de los derechos de autor?

Está muy bien y me gusta mucho en general, cómo está planteado, menos por el artículo 13 porque me afecta directamente a mí y a todos los youtubers.

Como ciudadano ves la Unión Europea como algo súperlejano"

¿Crees que la gente joven es consciente de lo importante que es votar en las elecciones al Parlamento Europeo?

No, son demasiadas elecciones seguidas y las europeas son las últimas. Si no te paras a leer un poco no tienes ni idea de lo que sirve la UE. El Estado español sí que lo percibe, la infraestructura sí, pero como ciudadano lo ves como una entidad súperlejana. Ni siquiera produce rechazo, es indiferencia. Cuando te informas sí que eres consciente de muchas cosas que te facilitan la vida como el roaming, la Zona schengen o la beca Erasmus y el Interrail que son dos de las cosas que más hacen los jóvenes, que prohiban los plásticos de un solo uso. Hay un montón de cosas que están de puta madre.

  5c8efb6a230000d50424f30eJaime Altozano

¿Qué es lo que falla entonces?

Los sistemas que crea la UE están genial, pero la parte creativa está por los suelos. La campaña de branding que tienen no les ha funcionado, por ejemplo, con el cómic de Capitán Europa, que es terrible. Lo que hago en mi vídeo está un poco mejor. Hablar del himno, de por qué es importante, de la vida de Beethoven. Es triste que la gente lo conozca por Miguel Ríos.

¿Cómo se podría incentivar más?

Lo que necesitaría es que alguien viniera a explicarme algo más de la Unión Europea, de la Guerra Fría, las estructuras y cómo funciona. Y me lo explicara fácil no leyéndome tres libros porque no tengo tiempo. La formación la tengo en cosas que necesito para vivir. Si alguien me contase qué es esto, las políticas que hay, la historia, si hicieses sentir que es algo mío, me interesaría muchísimo.

Con lo del artículo 13, me hice un lío para enterarme... Imagínate alguien que no tiene interés de base. Para escuchar música clásica pasa igual, se lo tienes que poner fácil a la gente. Le dices mira, voy a ponerte una Fuga de Bach de ocho minutos, pero te la voy a relacionar con Pokemon, La Oreja de Van Gogh y Lady Gaga y te voy a decir con cartelitos que te fijes en esto, esto y esto. A lo mejor a alguien que no le interesa se fija en eso así. Hay que coger el contenido y darle forma ordenándolo.

MOSTRAR BIOGRAFíA

Marina Prats es periodista de Life en El HuffPost, en Madrid. Escribe sobre cultura, música, cine, series, televisión y estilo de vida. También aborda temas sociales relacionados con el colectivo LGTBI y el feminismo. Antes de El HuffPost formó parte de UPHO Festival, un festival urbano de fotografía en el marco del proyecto europeo Urban Layers. Graduada en Periodismo en la Universidad de Málaga, en 2017 estudió el Máster en Periodismo Cultural de la Universidad CEU San Pablo y en 2018 fue Coordinadora de Proyecto en la Bienal de Arte Contemporáneo de Fundación ONCE. También ha colaborado en diversas webs musicales y culturales. Puedes contactarla en marina.prats@huffpost.es