Existe un país donde la soledad se ha convertido en una epidemia silenciosa, sobre todo entre los jóvenes. Como solución se ha creado una plataforma que permite contratar hombres mayores para conversar, escuchar y compartir experiencias vitales. 

Se trata de “Ossan Rental” y por apenas 1.000 yenes la hora, unos 6,20 euros, los usuarios pueden seleccionar entre decenas de perfiles de hombres de más de 40 años, e incluso de más de 70, dispuestos a ofrecer sabiduría cotidiana, compañía o simplemente escuchar sin prejuicios.

El concepto, a medio camino entre la asistencia emocional y el acompañamiento social, ha cobrado relevancia como reflejo de una necesidad cada vez más urgente en la sociedad japonesa, combatir el creciente aislamiento emocional. 

Un "alquiler" emocional 

El  propio nombre de la plataforma puede confundir ya que  "ossan" es el término coloquial que se utiliza para referirse a hombres de mediana edad y "rental" se traduce del ingles como "alquiler". Sin embargo, lo que realmente se alquila son sus conocimientos y sabiduría. 

Por ello, para evitar malentendidos, el sitio aclara de forma explícita que no se trata de una plataforma de citas ni se permiten relaciones sexuales, subrayando su enfoque puramente emocional y humano.

Estos señores provienen de distintos ámbitos: antiguos ejecutivos, ingenieros jubilados, artistas aficionados o simplemente hombres que desean compartir sus vivencias. Ofrecen consejos sobre relaciones, carrera profesional o simplemente una tarde de charla viendo béisbol por televisión. 

Su funcionamiento y utilidad

El sistema funciona de forma sencilla: el usuario elige su ciudad, navega entre perfiles con fotos y descripciones, donde se destacan habilidades como la paciencia, la empatía o la experiencia vital, y reserva una cita como quien alquila un apartamento.

El auge de este tipo de servicios pone en evidencia una realidad preocupante. Japón, con una de las poblaciones más envejecidas del mundo, experimenta un aumento sostenido de personas que viven solas. Entre los factores están el descenso del matrimonio, la baja natalidad, la viudez y el ritmo laboral que limita las relaciones sociales. Un estudio gubernamental reciente reveló que el 40% de los encuestados confesaban sentirse solos.