Llega a España la nueva tendencia europea al buscar compartir piso: "Busco compañero de piso que no teletrabaje"
Más allá de los exigentes requisitos a cumplir por los caseros, surgen nuevos entre los compañeros.

Buscar una habitación para vivir en Europa es una tarea cada vez más complicada. Los estudiantes tienen más dificultades para cumplir los exigentes precios y requisitos de los tenedores. Ahora, las personas que teletrabajan se están encontrando con algún escollo extra. Más allá del "prohibidas mascotas" o del "no se pueden hacer fiestas", hay gente que busca compañeros que no trabajen desde casa.
El periódico The Guardian ha hecho un análisis, consultado por la revista GenBeta, de los anuncios publicados en SpareRoom, una plataforma para buscar compañeros de piso. Así, ha encontrado "condiciones muy raras", como "gente que quiere que sus roomies no usen la cocine más que unos minutos porque no ven necesidad en tenerla ocupada", compañeros que no quieren fiestas ni visitas sorpresa en la casa, y otros que quieren que salgan de casa a diario para trabajar.
El análisis recabado concluye que las limitaciones al teletrabajo se han convertido en "las más restrictivas". De los 30 anuncios de pisos compartidos, más de la mitad dicen que un compañero de piso adecuado es alguien que "idealmente trabaja a tiempo completo fuera de casa", recaba la publicación. De hecho, en redes sociales se puede leer a muchos afectados por esta nueva condición.
De acuerdo a la información difundida, por un lado, los que defienden el "no teletrabajo" argumentan que estas normas sólo buscan mantener el hogar como "un espacio de descanso, recreación y hogar", "sin contaminarlo con charlas de oficina y reuniones de fondo". Por otra parte, ponen encima de la mesa el incremento económico. "Trabajando desde casa se gasta más luz, electricidad o calefacción, al pasar más horas en casa, conectado, cocinando siempre en casa y demás".
Asimismo, en una publicación de Reddit a la que ha tenido acceso el medio, una mujer española publicó su experiencia viral. "Llevo 4 meses compartiendo piso con dos chavalas que, hasta donde yo creía, son bastante majas. La convivencia es buena, hemos quedado para echarnos unas cañas, nos seguimos en las redes sociales... todo bien, todo en orden", relata. "Pues ayer, me las encuentro en el salón y me dicen que tenemos que hablar. Nuestro contrato de alquiler acaba este mes, y se supone que íbamos a renovar, pero me dicen que no les gusta que teletrabaje, que los gastos suben mucho, que quieren a alguien con su estilo de vida".
Otra de las experiencias captadas en la publicación, una mujer, que en el pasado compartió piso en Barcelona con teletrabajadores asegura, en declaraciones también recogidas por el medio, que tuvo "muy malas experiencias": "gente que siempre trabajaba en áreas comunes ocupando la mesa para comer todo el día sin dejar espacio para su uso real", relata. "No es cómodo, si quería relajarme para la hora del almuerzo en la sala de estar para ver la tele o prepararme algo de comer", explica esta persona.
