Una confusión con el seguro de coche acaba con una mujer en los tribunales: "Se declaró culpable el primer día, una vez comprendida la situación"
Tuvo que pagar una multa.
Una mujer moldava residente en Irlanda compareció ante el Tribunal de Distrito de Tullamore tras ser detenida por conducir sin seguro, aunque ella aseguró que todo se trató de un malentendido. La conductora, de 25 años, creía que era el vehículo y no el conductor quien debía estar asegurado, como ocurre en su país de origen.
El caso se remonta al 13 de febrero de 2025, cuando agentes de la Gardaí (la policía irlandesa) detuvieron a Maria Braga, con domicilio en Edenderry, condado de Offaly. Al comprobar que el coche no tenía un seguro válido a su nombre, fue acusada de infringir las leyes de tráfico.
Su abogado, Brian Duffy, explicó ante el juez Andrew Cody que su clienta “pensaba que el seguro se aplicaba al vehículo y no al conductor”, un error común entre quienes provienen de países donde el sistema funciona de manera diferente. Una vez comprendida la situación, se declaró culpable el primer día”, según publicó Offaly Express.
Un error sin maldad
Según la defensa, Braga había comenzado recientemente un nuevo empleo en un hotel local y no tenía intención de infringir la ley. “Fue una creencia errónea sobre las normas de tránsito irlandesas”, señaló Duffy, quien pidió al juez que no la inhabilitara para conducir, ya que dependía de su coche para trabajar.
El juez Cody aceptó que se trataba de un error de buena fe y decidió imponer una multa de 700 euros, permitiendo que fuera pagada en seis meses y sin retirar su licencia de conducir.
Reglas claras para conducir en Irlanda
El caso ha servido como recordatorio de las normas de tráfico y seguros en Irlanda. En el país, todo conductor debe tener un seguro válido a su nombre o figurar como conductor designado en la póliza del vehículo. No basta con que el coche esté asegurado, la cobertura se aplica específicamente a las personas autorizadas para conducirlo.
Además, todos los ocupantes deben usar cinturón de seguridad, y el uso del teléfono móvil al volante está prohibido. Irlanda también mantiene tolerancia cero con la conducción bajo los efectos del alcohol o las drogas. Las autoridades han recordado que quienes provienen de otros países deben familiarizarse con las normas locales para evitar sanciones.