El PSOE rechaza tramitar la Ley de Vivienda promovida por colectivos sociales y Podemos retira su firma

El PSOE rechaza tramitar la Ley de Vivienda promovida por colectivos sociales y Podemos retira su firma

En pocos días está previsto que el Consejo de Ministros remita a la cámara el anteproyecto de ley de vivienda pactado por los socios de gobierno.

Sector de la construcción de viviendas.AFP via Getty Images

El pleno del Congreso de los Diputados ha rechazado la toma en consideración de la proposición de ley de garantía del derecho a una vivienda digna y adecuada que elaboraron más de 120 organizaciones sociales -lo que impide su tramitación parlamentaria-, después de que Unidas Podemos (UP) retirara su firma del texto.

No obstante, a falta de la votación, UP ha asegurado que votará a favor y que ha quitado su firma porque el PSOE se lo ha pedido, ya que en pocos días está previsto que el Consejo de Ministros remita a la cámara el anteproyecto de ley de vivienda pactado por los socios de gobierno.

Para ser tramitada, la proposición de ley necesitaba también del apoyo del PSOE, que no se lo ha dado por considerar que “no respeta el marco constitucional, invade competencias autonómicas y bordea otros derechos constitucionales”, además de porque el Gobierno ya tiene listo un anteproyecto que “contiene muchos elementos” similares, ha explicado el diputado Ignacio López Cano.

Desde el grupo socialista señalan que Podemos ha retirado su firma porque era “incoherente” y sostienen que la proposición de ley de las organizaciones sociales “choca frontalmente” con el anteproyecto del Gobierno.

Durante el debate, la diputada del PP María Zurita ha acusado a Podemos de “dejar tirados” al resto de partidos de izquierdas, mientras que Juan Ignacio López-Bas (Ciudadanos) lo ha atribuido al “efecto Sánchez” y a que su “múltiple personalidad les está haciendo efecto”.

La representante de Podemos que ha participado en el debate, Pilar Garrido, no ha hecho ninguna referencia a que su grupo haya dejado de respaldar con su firma la iniciativa del movimiento social, que registró en la cámara el pasado 30 de septiembre junto con Más País, Bildu, ERC, CUP, Junts, Compromís, BNG y Nueva Canarias.

El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, ha arremetido contra la “izquierda cobarde que se pone del lado de los grandes propietarios y no de las familias” -en alusión al PSOE-, mientras que la representante de Bildu, Mertxe Aizpurua, ha opinado que el anteproyecto del Gobierno “se queda corto” y que hay que “aunar los dos proyectos en una buena ley de vivienda”.

Para el portavoz de Más País, Íñigo Errejón, se trata “acercarse a los modelos exitosos de París, Nueva York o Viena”.

Errejón ha argumentado que, de cada cinco casas que se venden, solo una está destinada a ser un hogar y el resto es “para la especulación e inflación de precios”, lo que “distorsiona” el mercado, que no es que esté desregulado, sino que está “regulado a favor de los rentistas”, por lo que es necesaria una “regulación que equilibre la balanza”.