Los secretos mejor guardados de los Patios de Córdoba
La primavera estalla en la ciudad andaluza y estos espacios se convierten en idílicos rincones de serenidad.
Del 1 al 13 de mayo, Córdoba se viste de colores, de cientos de colores, y se engalana para recibir a los miles de turistas ávidos de admirar la belleza de sus famosos patios, declarados Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
La Fiesta de los Patios se ha convertido en una cita fundamental en el calendario de la ciudad. El laborioso trabajo de todo el año para mostrarlos en todo su esplendor tiene su recompensa durante estos días, cuando gente llegada de cualquier lugar del mundo comparte sus sensaciones al descubrir esos pequeños oasis que se reparten aquí y allá en los barrios históricos de Córdoba.
Para visitarlos hay diseñadas varias rutas pero también se pueden visitar por libre y algunos están abiertos para quien quiera entrar. En este caso, proponemos disfrutar de uno de los recorridos más reducidos, la Ruta de los Patios de San Basilio —solo son cuatro— que en El HuffPost paseamos de la mano del presidente de la Asociación Amigos de los Patios y de Cervezas Alhambra.
Patios de Córdoba
Entre las flores que lo decoran hay tulipanes, narcisos, anémonas, carraspiques, acantos, geranios e incluso algunos helechos.
La gran joya de este patio es el lienzo de muralla del Alcázar Viejo, del siglo XIII, perfectamente integrado en el conjunto.
Llaman también la atención el suelo, de tradicional enchinado cordobés, y las dos columnas recuperadas de la construcción original.
Araceli dedica unas tres horas diarias al cuidado del patio, tanto en verano como en invierno, cuando las coloridas plantas de la primavera son sustituidas por otras propias de la época.
Para regar las que están más altas, el marido de Araceli ha ideado un sencillo sistema con una caña de pescar y una lata.
Esta vivienda es una construcción actual que sigue los dictados de la arquitectura tradicional y el patio, que se ha ubicado en el centro de la casa, es la zona más fresca.
Cientos de macetas de geranios cuelgan de las paredes encaladas y alegran este rincón ideado para el descanso y el encuentro.
Conocido como el Patio de la Costurera, se trata de una construcción tradicional que ha sido recuperada recientemente.
Paredes encaladas, marcos y ventanas pintadas de verde... El patio vuelve a lucir espléndido, adornado con macetas y plantas.
Que los patios luzcan bonitos supone un cuidado trabajo diario. Geranios y gitanillas son las flores habituales que alegran estos espacios.
Situado en el barrio del Alcázar Viejo, este patio es la sede de la Asociación Amigos de Los Patios Cordobeses y es uno de los más visitados de la ciudad.
El patio, de grandes dimensiones, en el pasado fue punto de encuentro de las 13 familias que llegaron a vivir en el edificio.
La construcción tiene dos plantas: la de arriba se ha transformado en sala de exposiciones y las estancias de abajo están ocupadas por artesanos de la ciudad.
A un lado del patio, dos grandes lavaderos encalados llaman la atención de los visitantes.
Las macetas y las plantas se apiñan en todos los rincones: damas de noche, rosas, hierbabuena, tomillo, romero, albahaca, madreselva, incienso, jazmines, limoneros...
La escalera es el elemento arquitectónico más particular y famoso del patio.
Araceli López Navajas es la propietaria y 'autora' de este patio de nueva construcción adornado con más de 420 plantas.
Entre las flores que lo decoran hay tulipanes, narcisos, anémonas, carraspiques, acantos, geranios e incluso algunos helechos.
La gran joya de este patio es el lienzo de muralla del Alcázar Viejo, del siglo XIII, perfectamente integrado en el conjunto.
Llaman también la atención el suelo, de tradicional enchinado cordobés, y las dos columnas recuperadas de la construcción original.
Araceli dedica unas tres horas diarias al cuidado del patio, tanto en verano como en invierno, cuando las coloridas plantas de la primavera son sustituidas por otras propias de la época.
Para regar las que están más altas, el marido de Araceli ha ideado un sencillo sistema con una caña de pescar y una lata.
Esta vivienda es una construcción actual que sigue los dictados de la arquitectura tradicional y el patio, que se ha ubicado en el centro de la casa, es la zona más fresca.
Cientos de macetas de geranios cuelgan de las paredes encaladas y alegran este rincón ideado para el descanso y el encuentro.
Conocido como el Patio de la Costurera, se trata de una construcción tradicional que ha sido recuperada recientemente.
Paredes encaladas, marcos y ventanas pintadas de verde... El patio vuelve a lucir espléndido, adornado con macetas y plantas.
Que los patios luzcan bonitos supone un cuidado trabajo diario. Geranios y gitanillas son las flores habituales que alegran estos espacios.
Situado en el barrio del Alcázar Viejo, este patio es la sede de la Asociación Amigos de Los Patios Cordobeses y es uno de los más visitados de la ciudad.
El patio, de grandes dimensiones, en el pasado fue punto de encuentro de las 13 familias que llegaron a vivir en el edificio.
La construcción tiene dos plantas: la de arriba se ha transformado en sala de exposiciones y las estancias de abajo están ocupadas por artesanos de la ciudad.
A un lado del patio, dos grandes lavaderos encalados llaman la atención de los visitantes.
