Golf, Ibiza y sus amigos de toda la vida: así es la vida de Carlos Alcaraz fuera de las pistas de tenis
El tenista murciano vuelve a ser el número uno del mundo tras ganar el US Open.

Carlos Alcaraz acaba de volver al número 1 del ranking ATP después de ganar por segunda vez el US Open ante Jannik Sinner y ahora se tomará unos días de descanso para celebrar la victoria con su familia y amigos.
El deportista ha insistido desde hace años en que, para él, ser feliz fuera de la pista es tan o más importante que conseguir éxitos dentro de ella, por lo que intenta mantener una estabilidad entre el trabajo y los pocos días libres que le permite el calendario. Así lo dejó claro en su docuserie de Netflix, A mi manera, en la que defendía su forma de afrontar su carrera.
En sus pocas semanas de vacaciones —la temporada termina a mediados de noviembre y a mediados de diciembre arranca la pretemporada— Alcaraz prefiere pasar su tiempo como la mayoría de jóvenes de su edad: con su familia en Murcia. El tenista, originario de El Palmar, es el segundo de cuatro hermanos. El mayor, Álvaro, lo acompaña en todos los torneos y trabaja como sparring ayudándolo a entrenar y a calentar antes de la mayoría de sus partidos, incluida la final del US Open.

La presencia de sus padres, Carlos y Virginia, también es habitual en los grandes torneos, aunque la madre del tenista suele quedarse más en Murcia con sus hermanos pequeños, Sergio y Jaime. Cuando vuelve a casa, Carlos Alcaraz vuelve a casa de sus padres y duerme en la habitación de su infancia, algo que sorprendió cuando se estrenó la serie de Netflix sobre su vida.
Además de su familia y su equipo, es habitual que el grupo de amigos del murciano esté presente en las grandes citas de Alcaraz. Algunos de ellos, como Pedro Cobacho, se remontan a la infancia, cuando entrenaban y competían juntos en las pistas de su localidad natal.
La tradición de Ibiza y el golf para desconectar
Mientras que la mayoría de tenistas eligen Maldivas para desconectar en sus vacaciones, Alcaraz ya ha convertido en tradición visitar Ibiza en los días entre Roland Garros y Wimbledon. Tal y como explicó él mismo, el primer año que estuvo en la isla balear conquistó los torneos de Queen's y Wimbledon y ha querido mantener la tradición para no tentar a la suerte.
Las vacaciones de Alcaraz en la isla han despertado polémica entre algunos aficionados al tenis que acusaban al murciano de no tomárselo en serio pero, a juzgar por los resultados de los últimos dos años, estas vacaciones funcionan.
Este año, además, el tenista estuvo unos días en El Puerto de Santa María (Cádiz), donde se le pudo ver, junto a su grupo de amigos, disfrutando del sol, la gastronomía de la zona y de un concierto de Juan Magán.
Durante los torneos, el tenista suele disfrutar de cenas con su equipo, partidas de cartas y especialmente del golf siempre que tiene un día libre o si organiza sus entrenamiento de manera que puede disfrutar de este deporte.
La pasión de Alcaraz por este deporte es tal que ha celebrado cada victoria durante el US Open imitando el golpe de swing de los golfistas e incluso ha retado a algunos compañeros de profesión a enfrentarse a él, presumiendo de buenos resultados.
Entre golf, tenis y cartas, Alcaraz reconoce que no tiene demasiado tiempo para ver series y que suele apostar más por películas. En una de sus últimas ruedas de prensa en Nueva York, el tenista citó Pulp Fiction o Shutter Island, entre los títulos que había visto recientemente y le habían gustado.
