Letizia rescata el vestido más aplaudido de Pertegaz: tres actos, tres maneras de llevarlo
La reina ha reutilizado esta prenda para dar la bienvenida al sultán de Omán.

Más de dos años después de la última visita de Estado, los reyes Felipe y Letizia han vuelto a ejercer de anfitriones con el sultán de Omán, al que han recibido con honores en el patio del Palacio Real. Para hacer frente al frío matutino en Madrid, la reina Letizia se ha anudado un abrigo negro que apenas dejaba ver su vestido pero que daba pistas de la prenda elegida para la ocasión.
La reina ha rescatado un vestido de Pertegaz que ha dejado ver durante el almuerzo que se ha celebrado este mediodía en Zarzuela. Se trata de un diseño gris perla con una gran lazada al cuello, mangas ligeramente abullonadas y flores bordadas salpicadas por el cuerpo y parte de la falda.

Letizia lo ha combinado con accesorios sobrios: unos salones de tacón bajo en color negro, unos pequeños pendientes de diamantes y un bolso de Carolina Herrera del que ha prescindido durante el almuerzo.
La reina estrenó el vestido en 2019, durante las audiencias con los galardonados de los Premios Princesa de Asturias. Era la primera vez que Letizia volvía a lucir una prenda de la firma, con una nueva dirección creativa, después de que Pertegaz se encargara de diseñar su vestido de novia en 2004.
Entonces, la consorte también lo combinó con unos tacones negros, aunque se trataba de un modelo destalonado y con un tacón mucho más alto que el que acostumbra a lucir actualmente a causa del Neuroma de Morton que sufre en un pie desde hace unos años.

En 2019, la reina prefirió llevar el pelo recogido para destacar todavía más la gran lazada, que es la principal protagonista del vestido, y los pendientes de diamantes de su boda que rescató ese día para hacer un doble guiño. Sin embargo, este martes ha preferido lucir la melena suelta y ligeramente ondulada.
Este vestido de Pertegaz es uno de los más aplaudidos del armario de Letizia y puede sostenerse por si mismo sin necesitar demasiados accesorios, pero la reina demostró en 2022 que con los complementos adecuados se puede dar un giro a la prenda.
La segunda vez que lo lució fue en 2022, en un almuerzo para homenajear al Premio Cervantes, donde lo combinó de manera radicalmente diferente a lo que ha hecho este martes o en 2019.

Desmarcándose del negro, Letizia prefirió combinarlo con tacones y bolso de mano en color rosa haciendo que la prenda fuera más apropiada para la primavera que para el otoño.
En ese acto, la reina apostó por un semirecogido que dejaba la parte superior del rostro despejada pero con la melena suelta sobre los hombros. Los pendientes también eran diferentes, concretamente, una pieza de citrino y oro blanco.
