Los expertos han recomendado enterrar un artilugio en casa para decir adiós durante el verano a las altas facturas que se suele propiciar por el uso del aire acondicionado en muchas casas.

Es el denominado "pozo canadiense", una idea sencilla con la que se puede refrescar perfectamente la casa pese a las altas temperaturas que se vive en el exterior. Permite que el aire no se estanque en el interior.

También son conocidos como pozos provenzales y funcionan gracias a un intercambio natural de temperaturas. La idea es generar una corriente de aire por convección, desde el suelo.

Este artilugio sirve para introducir el aire frío en la estancia y expulsa el aire caliente del interior. Algo que sirve para renovar el aire estancado y así se logra bajar la alta temperatura.

La pregunta es, ¿cómo es posible? Pues es fácil, la temperatura del suelo es menor que la del exterior. El rendimiento se mejora al usar un sistema para recolectar el aire entrante de la zona más fría de la habitación. Por ejemplo, usando un jardín cercano.

Las tuberías deben estar selladas y enterradas para que queden aisladas del sol. Deben ser enterradas entre 2 y 5 metros bajo tierra y así se podrá generar una gran corriente de aire.