El ácido fólico ya se puede tomar de un trago: 11 razones para sustituir las pastillas
¿Te imaginas poder beneficiarte de los efectos de una pastilla de ácido fólico tomándote una bebida láctea con sabor a chocolate? Eso es Puleva Mamá. Los 100 mililitros que contiene cada botella están enriquecidos con nutrientes fundamentales para asegurar a las embarazadas y lactantes la ingesta necesaria de ácido fólico, yodo, Omega 3 DHA, fibra y otros minerales y vitaminas importantes en estas etapas. Ya hay una alternativa natural y práctica a las pastillas de siempre y, además, se compra en el supermercado.
1. Una fórmula tres en uno. La composición de Puleva Mamá está diseñada para antes del embarazo, durante la gestación y para el periodo de lactancia. En estas tres situaciones la mujer tiene unas necesidades extra de vitaminas y minerales, entre otros nutrientes, que esta bebida láctea ayuda a cubrir. Una botella al día proporciona el yodo que precisa el organismo de una embarazada diariamente, un mineral esencial para el funcionamiento del sistema nervioso y cognitivo. Por otra parte, asegura la cantidad de ácido fólico que necesita para prevenir deformaciones congénitas en el feto.
2. Es un suplemento importante. El ácido fólico que contiene es clave para la formación del tubo neural, una estructura precursora del sistema nervioso central “que se cierra a los 21 días de gestación, cuando muchas mujeres ni siquiera saben que están embarazadas, de ahí que se recomiende utilizar una suplementación en las mujeres que piensan concebir”, apunta María Jesús Cancelo, jefa de Ginecología del Hospital de Guadalajara.
3. Ayuda a alcanzar los nutrientes que necesitas. Cada botella de Puleva Mamá, además de ácido fólico y yodo, aporta la mitad de la cantidad diaria recomendada de omega 3 DHA. El organismo por sí mismo no genera, en cantidad suficiente, este ácido graso que es clave en la función cognitiva y debe ingerirse a través de la dieta. Por otra parte, contiene el 38% del calcio que necesita una embarazada al día y además, su fórmula láctea ayuda a la absorción y biodisponibilidad de los nutrientes.
4. Tan apetecible como un batido. Tomar Puleva Mamá es como si dieras rienda suelta a un antojo por el chocolate, con la diferencia de que con este producto lácteo estás asegurándote los nutrientes fundamentales que requiere tu cuerpo. El sabor no es casual, está pensado para solventar el mal sabor y olor que tienen los suplementos tradicionales, según muchas embarazadas, y que no hace precisamente apetitoso tomarlos.
5. No te preocupes: no es un chute de glucosa. Es de lo más sabroso y al mismo tiempo tiene muy pocos azúcares añadidos. Cada botella contiene 1,50 gramos de azúcar añadido, menos de la mitad de un terrón, lo que representa el 3,5% de la ingesta máxima diaria de azúcares que recomienda la OMS para un adulto sano que tome una dieta de 2.000 calorías.
6. Una fórmula con revisión médica. La composición de Puleva Mamá cumple con el protocolo de las recomendaciones nutricionales para una mujer embarazada. Lo dice la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), que ha revisado la fórmula. Esta organización y las Fundaciones Española e Iberoamericana de Nutrición han constatado que la dieta de las embarazadas no cumple actualmente con las guías alimentarias y por ello recomiendan suplementar la alimentación. Así lo reflejan en el informe La leche como vehículo de salud en situaciones fisiológicas especiales: mujer gestante.
7. La leche, imprescindible en la dieta. No ha habido que inventarlo en un laboratorio, la naturaleza nos ha proporcionado la leche, un alimento completo para cualquier persona e imprescindible para las embarazadas. Lo es porque tiene calcio, vitamina D y vitaminas del grupo B, entre otros nutrientes. En una situación como el embarazo los beneficios de incorporarla como un fijo en la dieta se multiplican. Según el informe La leche como vehículo de salud en situaciones fisiológicas especiales: mujer gestante, “tiene efectos beneficiosos sobre el crecimiento y desarrollo fetal y sobre la salud de la madre y la del bebé”. Sin embargo, como señala María Jesús Cancelo, “ni la leche convencional ni una dieta normal cubren las necesidades nutricionales que tiene la mujer embarazada, que aumentan durante este periodo y también en la lactancia. Por eso hay que recurrir a suplementos”.
8. Tomar suplementos es fácil y delicioso. No es cierto que la mujer gestante necesite comer por dos como se decía antes, pero el dicho sí refleja una realidad: los requerimientos de algunos nutrientes claves son mayores durante esta etapa, y la manera tradicional de asegurar la ingesta apropiada ha sido a través de suplementos. ¿Hay alguna forma óptima y natural de tomarlos? Según el documento elaborado por las sociedades científicas, la leche es uno de los mejores vehículos para desarrollar alimentos fortificados que ayuden a asegurar la ingesta de estos nutrientes. Puleva ha liderado históricamente en España su desarrollo.
9. Lo tienes a mano en tu súper. Al contrario de lo que ocurre con la suplementación tradicional, que hay que adquirir en las farmacias, Puleva Mamá puedes conseguirla al mismo tiempo que haces la compra normal. Eso sí, siempre hay que consultar con el ginecólogo. Él es el profesional que podrá resolverte cualquier duda y explicarte mejor que nadie las características del producto.
10. Cuesta la mitad que un café. Por 0,55 euros al día, el coste de una botella de Puleva Mamá, una embarazada tiene la tranquilidad de tomar cada día los nutrientes que su cuerpo y el de su bebé necesitan. El precio es competitivo con respecto al de las pastillas. El envase de seis botellas de 100 mililitros cuesta 3,30 euros, según el precio recomendado, lo que supone 16.50 euros al mes.
11. Puedes echarla al bolso. No hace falta guardar las botellas en la nevera, se conservan a temperatura ambiente hasta su fecha de caducidad. Una vez que se ha abierto el envase sí debe consumirse al momento. Si prefieres tomar esta bebida láctea caliente, hay que verterla en un vaso porque la botella no es apta para el microondas.