Un grupo de científicos sigue la pista de una foto en una selva remota y da con el insecto más pesado de Australia
El hallazgo comenzó a raíz de una fotografía que despertó el interés del equipo investigador.
Un grupo de científicos de la Universidad James Cook, en el norte de Australia, ha identificado una nueva especie de insecto palo gigante, denominada Acrophylla alta, que destaca por ser el más pesado descubierto hasta ahora en el país. El ejemplar, hallado en una remota zona montañosa del estado de Queensland, pesa 44 gramos (similar a una pelota de golf) y alcanza los 40 centímetros de longitud.
La especie fue localizada en la meseta de Atherton, a más de 900 metros de altitud y unos 50 kilómetros al suroeste de Cairns, en el Área de Patrimonio Mundial de los Trópicos Húmedos. Se trata de un ecosistema frío, húmedo y de difícil acceso, lo que explica que el insecto haya permanecido oculto hasta ahora. Según explicó el profesor Angus Emmott, uno de los responsables de la investigación, “están restringidos a una pequeña zona de selva tropical de gran altitud y viven en lo alto del dosel. A menos que un ciclón o un pájaro los derribe, es muy difícil verlos”.
El hallazgo comenzó a raíz de una fotografía que despertó el interés del equipo investigador. La búsqueda culminó con el hallazgo de dos hembras, una de ellas estudiada tras poner huevos que resultaron clave para confirmar que se trataba de una especie aún no documentada. Los resultados fueron publicados en la revista científica Zootaxa, y los ejemplares han sido incorporados a la colección del Museo de Queensland para futuras investigaciones. Hasta la fecha, no se ha logrado encontrar ningún macho.
La considerable masa corporal del Acrophylla alta se interpreta como una respuesta evolutiva al clima frío y húmedo de la región. “Probablemente les ayuda a sobrevivir en estas condiciones. A lo largo de millones de años han alcanzado este tamaño por necesidad adaptativa”, explicó Emmott.
Aunque se trata del insecto más pesado registrado en Australia, no es el más pesado del mundo. Ese récord lo ostenta el weta gigante, una especie endémica de Nueva Zelanda similar a un saltamontes, que puede alcanzar hasta 71 gramos, según el portal de Guinness World Records.