Anneli, firme sobre la situación por la que atraviesan muchos abuelos con sus nietos: "Son demasiado amables y temen el conflicto"
Para Anneli, parte del problema está en la dificultad de los mayores para poner límites.

Una carta enviada por una lectora del diario kodinkuvalehti, Anneli, ha reabierto el debate sobre el papel que hoy desempeñan muchos abuelos en el cuidado de sus nietos. En su mensaje, describe una realidad que, según afirma, se repite entre sus amigos y familiares: abuelos que asumen largas jornadas de cuidado sin haberlo pedido ni haber sido consultados.
Anneli explica que numerosos mayores sienten que sus hijos adultos dejan a los pequeños durante fines de semana completos, semanas e incluso meses, normalmente cuando los padres se van de vacaciones o se dedican a sus aficiones. En muchos casos, asegura, ni siquiera se pregunta a los abuelos si pueden ocuparse de los niños o si están en condiciones físicas o económicas para hacerlo.
“Muchos están al límite de sus fuerzas y de su dinero”, lamenta. Y señala que muchos de ellos deben elegir entre comprar alimentos o medicinas, mientras lidian con problemas de salud que requieren descanso y atención. Aun así, añade, muchos se esfuerzan por no tensar la relación con sus hijos, incluso cuando la carga es demasiado grande.
Para Anneli, parte del problema está en la dificultad de los mayores para poner límites. “Me parece que muchos abuelos son quizás demasiado amables y temen el conflicto”, escribe. Aunque destaca que el cariño hacia los nietos es indudable, insiste en que cuidar de uno mismo también es esencial.
La lectora invita a otros mayores a compartir experiencias y soluciones: cómo han gestionado situaciones similares, si han conseguido acuerdos justos con sus hijos y qué estrategias han encontrado para que nadie —ni los abuelos ni los niños— se vea sobrecargado.
