Leire Martínez: "Me ha costado mucho conectar con otra emoción que no fuera el dolor"
La cantante publica 'Mi nombre', su primer single en solitario tras dejar La Oreja de Van Gogh.
A falta de un comunicado que incluya su firma tras la salida del grupo, poco más se podía decir con una canción. Bajo el título Mi nombre, con la que Leire Martínez lanza su carrera en solitario tras meses en el centro de titulares y rumores después de su comentada salida de La Oreja de Van Gogh.
Martínez ya había roto su silencio y se ha mostrado "dolida" y "enfadada" por su cómo se gestionó la salida del grupo donostiarra, que se hizo pública el pasado mes de octubre con un comunicado unilateral en el que informaban que la de Rentería abandonaba la formación tras 17 años, pero hasta ahora no se sabía nada de su nuevo proyecto.
Con el huracán mediático que todo ello ha despertado y con el rumor constante de un posible regreso de Amaia a La Oreja de Van Gogh, la cantante asegura a El HuffPost que hacer este tema en solitario le ha servido como terapia. "Cuando me senté a escribir y probarme, me di cuenta de que me ha costado mucho conectar con cualquier otra emoción que no fuera el dolor", señala.
Aunque el comunicado de la banda fue publicado el 14 de octubre, Martínez revela que el 7 de octubre en su concierto en Zaragoza durante las fiestas del Pilar "ya intuía que iba a ser el último concierto con La Oreja". Lejos de hablar con acritud del grupo, Martínez recalca que sus 17 años al frente de la banda con temas como Inmortal, El último vals o La niña que llora en tus fiestas, son "galones". "Estoy superorgullosa de todo lo que he vivido con La Oreja", recalca.
Tras 17 años de carrera con el grupo, Martínez se embarca en un nuevo proyecto, el primero en solitario tras su salida de Factor X (Cuatro) en 2007, pese a que desvela haber tenido un conato de proyecto con el entonces miembro de El Sueño de Morfeo, David Feito, pero que se frustró por la llamada del grupo tras la salida de Amaia Montero.
¿Cómo surge este Mi nombre? ¿Te ha servido para resarcirte?
Esta canción surge porque cuando ya por fin tomo la decisión de que quiero seguir adelante y que quiero seguir contando historias y que me quiero sentar a escribir y a probarme, me di cuenta de que me ha costado mucho conectar con cualquier otra emoción que no fuera el dolor.
Al principio me empeñaba en desplazar esa emoción, pero llegó un momento que dije, "vamos a ver, ¿por qué no? Si ahora mismo es lo que siento, ¿por qué no voy a validar esa emoción? ¿Por qué no le voy a dar su lugar?". Y esta canción nace precisamente de eso, de darle lugar a esa emoción porque además me he dado cuenta de que para mí ha sido al final terapéutico hacerlo.
Probablemente si no lo hubiera hecho me hubiera quedado ahí enganchada. Si no hubiera transitado esa emoción y no hubiera dado el lugar que se merecía, me hubiera costado mucho soltar. Entonces decidí que le tenía que dar su lugar. Que no pasa nada. Que todo es válido y que no quiere decir que sea lo único, pero en ese momento es lo que había. Posiblemente si no hubiera hablado de ello, no hubiera podido luego conectar con otras cosas porque a partir de ahí sí pude.
De hecho, has incluido una frase de El último vals en la canción.
Sí, sé perfectamente que se coge. Es algo que nunca había dicho en voz alta y me di cuenta de que necesitaba hacerlo.
¿Sientes que por fin tienes voz propia fuera de la marca del grupo? ¿Has sentido alguna vez que necesitabas expresarlo así?
Si, pero es de forma natural, no es un "por fin". Yo he querido estar 17 años en un grupo bajo esa marca. Quiero decir, cuando tú formas parte de un algo, cuando no eres tú solo sino formas parte de algo, ese algo hay que definirlo, ese algo hay que delimitarlo. Para poder hablar de ello, para poder explicarle a la gente qué somos.
En eso, los cinco hemos llegado a acuerdos de qué queríamos comunicar y transmitir bajo o desde el epígrafe de La Oreja de Van Gogh. Yo he aceptado eso, he querido estar ahí, por lo tanto no es un "por fin", sino que cuando formas parte de un grupo, te debes a los principios que hemos establecido. Si no, no es grupo.
Todas las relaciones tienen que tener normas. Todas. Y esas normas tienen que definirse y ver qué tipo de relación son. Si tú y yo no definimos la relación que hay entre nosotras, tú puedes entender una cosa y yo otra. Quizás tú te sientas invalidada en algunos aspectos y yo eso no lo sé porque no lo hemos definido.
Si tú no me indicas a mí que tus límites llegan hasta aquí o que tú hay cosas con las que no te encuentras cómoda o que para ti esas son las líneas rojas, si yo lo desconozco, es probable que, por desconocimiento, lo invada. En todas las relaciones creo que es importante marcar y dejar claras estas cosas.
Como grupo yo he defendido lo que habíamos decidido entre todos y no me arrepiento para nada. Para mí es lo que había que hacer. Ahora ya no estoy en el grupo, por lo tanto, ahora estoy sola, yo decido y hago y deshago lo que sea, pero no es "por fin". Sin ninguna connotación.
Cuando salió el comunicado de La Oreja de Van Gogh, algunos fans recuperaron el vídeo de las actuaciones del Pilar del 7 de octubre en Zaragoza, de ese último concierto en el que se te veía muy emocionada. ¿Tú ya sabías lo que iba a pasar?
Yo sabía que ese iba a ser probablemente mi último concierto con La Oreja. Lo sabía y lo intuía que iba a ser así.
Dices que has sido terapéutico sacar este tema y sacar esos sentimientos hacia afuera. ¿Cómo has gestionado en tu vida toda la cantidad de noticias, de rumores ciertos o no del regreso de Amaia que han ido saliendo?
Pues mira, afortunadamente en eso he hecho un máster a lo largo de los 17 años que llevo. Te voy a decir, que el máster más potente lo hice nada más entrar al grupo. En ese sentido ya he aprendido que me tengo que proteger porque a mí las cosas me afectan.
A mí no me hace bien estar leyendo redes sociales todo el tiempo ni estar siguiendo la noticia ni los hilos. A mí no me hace bien, por lo tanto, no lo hago y eso lo aprendí hace muchos años y he seguido en la misma línea. Me he protegido y he tirado de las herramientas que me ayudan a conciliar que es la terapia fundamentalmente, porque incluso cuando hablo con mis amigos o familia, al final estoy haciendo un poco de terapia. Esas han sido las herramientas que me han ayudado.
¿Crees que hay un punto de machismo en eso de querer enfrentarte con Amaia, de enfrentar a dos mujeres?
Mira, sí creo que el machismo forma parte todavía de la sociedad en la que vivimos. Ojalá no fuera así y hubiéramos conseguido normalizar y llegar a esa igualdad soñada. Pero creo que todavía no estamos ahí. Por lo tanto, poner el foco en nosotras y sobre todo, en aspectos despectivos o negativos, sí puede tener ramalazos machistas. Pero creo que el machismo no es el único problema que tenemos como sociedad, porque ahora me van a comparar y me van a rivalizar con mis compañeros, que son hombres.
Por lo tanto, ¿ahí de qué estaríamos hablando? Porque no es machismo... Creo que vivimos en una sociedad que necesita y que se alimenta del dolor. Entonces, lo buscamos y lo generamos. Y permitimos como sociedad que esto ocurra porque la mayoría de lo que leo, la mayoría de lo que escucho, todo tiene un tinte desde la perspectiva de "o conmigo o contra mí", "ganadores y perdedores" ¿sabes lo que te quiero decir? Pasa en todo, en nuestras relaciones pasa muchas veces eso.
Creo que tenemos un problema como sociedad, no lo comparto y no me gusta. Eso no quita para que sí crea la parte del machismo que me comentabas, creo que también, pero que no es la única reflexión que deberíamos hacer como sociedad.
¿Y vas a seguir interpretando tus canciones con La Oreja de Van Gogh en directo como hiciste en los premios Dial o en la carrera solitaria de la EITB?
Si. Claro que sí y agradezco que me incluyas.
¿Y si te tuvieras que quedar con una de ellas, cuál sería?
Bueno, pues es difícil, ¿eh? Porque creo que ahora mismo la canción de Inmortal ha adquirido de pronto una dimensión que yo no sentía que tuviera y de pronto sí que tiene algo especial. Pero no es la única. Creo que Jueves va a ser una canción muy importante en mi vida siempre, El último vals, Muñeca de trapo es una canción que a mí me ha movido siempre mucho.
Fíjate que Rosas era una canción que cuando yo entré al grupo me costaba mucho cantar porque siempre he sentido que era una de las canciones más representativas de Amaia. Lo he sentido yo, algo mío propio, no por nada. Era un tema que a mí me costaba mucho porque con él sentía que a la gente le costaba ver a La Oreja conmigo cantando Rosas. Yo lo percibía, o era cosa mía, pero a mí eso me pasaba. Entonces era un tema que me costaba mucho, pero con el que me he reconciliado a lo largo de los años. Es una canción que en los últimos años me ha dado momentos únicos con el grupo. Ver a un festival entero cantando al unísono Rosas es una sensación y una experiencia que es uf, muy especial.
Y volviendo unos cuantos años atrás, cuando saliste de ese Factor X, ¿tenías planteado este proyecto que ahora vas a lanzar en solitario o antes de que te llamara LODVG?
No. Sí es verdad que cuando yo salgo de Factor X intento probar suerte, me quedo aquí en Madrid y lo intenté.
Tuve un conato de proyecto que no llevó a ver la luz porque precisamente apareció La Oreja. Estuve inmersa en un proceso de creación y de composición junto con David Feito, que era componente del Sueño de Morfeo en aquel momento. Hicimos una maqueta del proyecto que finalmente no vio la luz porque La Oreja apareció en mi camino.
¿Te pesa la etiqueta de ex de La Oreja ahora que inicias tu carrera en solitario?
¿Pesarme? No, para nada. Para mí son galones. No es pesarme para nada. Estoy superorgullosa de haber pasado por La Oreja y de todo lo que he vivido. Todo. No, no, pesarme jamás.
Te hemos escuchado cantar en euskera en más de una ocasión, ¿te podremos escuchar cantar en euskera en este nuevo proyecto?
Espero que sí, es un propósito que tengo porque me apetece. Evidentemente, no va a ser un disco solo en euskera. Mayoritariamente va a ser un disco en castellano, pero sí que me apetece que haya un hueco para canciones en euskera. Tiene mucho que ver con reivindicarme a mí, yo soy eso también. Para mí tiene un espacio muy importante en mi vida por quién soy, mi identidad y, por tanto, tiene que estar ahí.