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El incómodo momento entre el príncipe Guillermo y el príncipe Andrés en el funeral de la duquesa de Kent que pudo haber salido muy caro al príncipe de Gales

El incómodo momento entre el príncipe Guillermo y el príncipe Andrés en el funeral de la duquesa de Kent que pudo haber salido muy caro al príncipe de Gales

El duque de York podía tener el gesto muy calculado, pero su sobrino sabía perfectamente que estaban en público.

El príncipe Guillermo escucha al príncipe Andrés en el funeral de la duquesa de Kent
El príncipe Guillermo escucha al príncipe Andrés en el funeral de la duquesa de Kent.GTRES

Decir que el príncipe Andrés es la oveja negra de la familia real británica sería hasta benévolo. Puede que su madre, Isabel II, le protegiera de cierto modo, y puede que su hermano, Carlos III, esté harto de él e intente ponerle en su sitio, no siempre con éxito, pero lo que está claro es que el más beligerante contra el duque de York siempre ha sido el príncipe Guillermo. No es lo mismo un hijo o un hermano que un tío, y el príncipe de Gales es consciente de que la imagen del príncipe Andrés es un lastre para la monarquía.

El antiguo héroe de la guerra de las Malvinas, el hijo favorito de la reina Isabel que levantaba pasiones en su juventud, destruyó su reputación por su amistad con el delincuente sexual Jeffrey Epstein, que se suicidó en su celda en agosto de 2019. Tuvo la oportunidad de haber renegado de él, y no lo hizo. 

El príncipe Andrés en el funeral de la duquesa de Kent
  El príncipe Andrés en el funeral de la duquesa de Kent.GTRES

Sumado a ello estuvo la acusación de Virginia Giuffre, una de las víctimas de Epstein, que le acusó de haber abusado de ella cuando era menor. Finalmente no hubo juicio, pero sí acuerdo millonario y una disculpa pública del duque de York, que no llegó a reconocer los hechos, pero sí lamentó el sufrimiento de ella. Giuffre se suicidó en abril de 2025. Y hay que sumar ingentes polémicas y salidas de tono que han provocado que haya caído a lo más bajo... más o menos.

Fue apartado de la casa real británica, no puede hacer uso del tratamiento de alteza real, y se le han quitado fondos de la corona, pero sigue viviendo a cuerpo de rey en el Royal Lodge de Londres, y eso que Carlos III le ofreció mudarse a Frogmore Cottage. Por si fuera poco, insiste en acudir a actos públicos de la familia, donde realmente no se le puede vetar... o sí, pero al menos en el funeral de la duquesa de Kent no se le prohibió la entrada.

El príncipe Andrés, Carlos III y el príncipe Guillermo en el funeral de la duquesa de Kent en la catedral de Westminster
  El príncipe Andrés, Carlos III y el príncipe Guillermo en el funeral de la duquesa de Kent en la catedral de Westminster.Getty Images

Así, en la tarde del 16 de septiembre de 2025, el príncipe Andrés y Sarah Ferguson fueron dos de los muchos miembros de la familia real británica que se desplazaron a la Catedral católica de Westminster de Londres para dar su último adiós a la duquesa de Kent. Ambos parecían encantados de dejarse ver en público pese a lo incómoda que resulta su presencia. 

El príncipe Guillermo no quiere pasar por el aro

Y si fue incómodo solo verle ahí, más fue cuando terminó el funeral. El duque de York se quedó en la puerta con el resto de la familia. Se le vio hablando con sus hermanos, Carlos III y la princesa Ana. 

El príncipe Andrés y la princesa Ana en el funeral de la duquesa de Kent
  El príncipe Andrés y la princesa Ana en el funeral de la duquesa de Kent.GTRES

Quizá no deberían haberlo hecho y deberían distanciarse en público del elemento más tóxico de su familia, pero se dejaron ver conversando con él ante las cámaras. Con ellos, le funcionó. No ocurrió lo mismo con su sobrino Guillermo, poco amigo de concesiones a un tío que solo le da problemas y con el que prefiere tener un contacto mínimo.

Cuando estaban al lado, el duque de York giró la cabeza y comentó algo con el príncipe de Gales, que educadamente le miró mientras se expresaba con él. Andrés pareció bromear en algún momento, pero al heredero no le hizo gracia y no dijo absolutamente nada. Después prefirió ignorarle

Así, Andrés trató de mostrar en público que el futuro de la monarquía le aprecia, pero si el gesto estaba calculado, le salió el tiro por la culata porque su sobrino no cayó en la trampa. Sabía que había cámaras y que no era el mejor momento, aunque evidentemente debía ser mínimamente educado. Pero al final, pasó la prueba. No quiere que le relacionen más de lo posible con una de las personas que más daño han hecho a la imagen de la monarquía británica.

Y aparte, poco después supo que había hecho bien porque la visita de Estado de Donald Trump a Reino Unido, que comenzó horas después, lo hizo con una bienvenida no oficial de parte de manifestantes contrarios al presidente de Estados Unidos, que como mostró el periodista de ITV Chris Ship en las redes sociales.

El corresponsal real compartió un vídeo en el que se ve cómo los manifestantes lograron proyectar imágenes de Jeffrey Epstein, Donald Trump y el príncipe Andrés en los muros exteriores del castillo de Windsor, escenario principal de la visita de Estado del presidente y la primera dama de Estados Unidos a Reino Unido.

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Soy redactor de LIFE en El HuffPost España, esa sección siempre necesaria en la que mostramos otro lado de la vida más amable y los temas que quizás no lo son tanto, pero que deben estar en la agenda.

 

Sobre qué temas escribo

Me encargo de contarte todo sobre los royals, un mundo apasionante en el que hay mucho que explicar, descubrir y analizar. También sobre celebrities, viajes, gastronomía y temas de sociedad. No puedo olvidar mi pasión por la cultura en general y por los libros en particular. Por eso realizo de forma habitual entrevistas a autores, algunos de ellos muy conocidos y mediáticos y otros que no lo son tanto pero que también tienen mucho que contar y que ofrecer. Por supuesto no olvido las redes sociales. Siempre estoy pendiente sobre todo de los stories de Instagram para acercar el contenido del Huff. Y de vez en cuando me pongo delante de la cámara para hablar sobre qué está pasando en el mundo royal, porque ahí siempre ocurre algo que merece la pena contar.

 

Mi trayectoria

Nací en León, me crie en Oviedo y me trasladé a Madrid para estudiar periodismo. Desde niño tuve claro que lo mío era contar historias, que mi vocación y mi pasión era y es el periodismo. Formé parte del periódico de mi colegio, y a los 12 años escribí un pequeño libro que nunca ha visto la luz, así como otras historias detectivescas y cómicas, y tuve claro que nada me gustaba más que formar parte algún día de una redacción, así que cursé periodismo en la Universidad Carlos III de Madrid. En segundo de carrera debuté en el mundo profesional con unas prácticas en las que aprendí cómo funcionan los medios locales y una radio. Continué en ABC.es, Cuatro y CNN+, Europa Press y después llegó NOXVO, donde me contrataron para llevar desde su nacimiento un medio digital lifestyle llamado Bekia.

 

Durante mis 14 años en Bekia, me encargué de coordinar la web, escribir sobre realeza, hacer entrevistas a personas relevantes tanto nacionales como internacionales, algunas de ellas realizadas en Cuba, París, Berlín o Venecia, redactar temas de viajes y gastronomía y ponerme delante de la cámara no solo para las citadas entrevistas, sino para grabar vídeos sobre realeza en el programa Royals, con el que cosechamos un gran éxito en Youtube. Esa etapa finalizó en agosto de 2025, cuando me incorporé con muchas ganas e ilusión a la sección de LIFE del Huff Post, donde no solo he podido seguir realizando labores similares, sino que me ha permitido conocer otros ámbitos y crecer profesionalmente. Por cierto, coescribí una obra de teatro y no pierdo la esperanza de ponerme de una vez con la novela a la que tantas vueltas sigo dando.

 


 

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