Un estudio descubre que la combinación de dos medicamentos baratos salva vidas tras un ataque cardiaco
La investigación ha sido realizada por científicos del Imperial College de Londres y la Universidad de Lund en Suecia.

Las enfermedades cardiovasculares son la causa de muerte más común del mundo, según recoge la Organización Mundial de la Salud (OMS). Además, cuando una persona consigue sobrevivir a un ataque cardíaco, el riesgo de padecer un segundo es mayor, pues los vasos sanguíneos son más sensibles y es más fácil el desarrollo de coágulos de sangre.
Sin embargo, un estudio realizado por investigadores del Imperial College de Londres y la Universidad de Lund en Suecia ha hallado que la mezcla de dos medicamentos económicos y al alcance de todos podría reducir la posibilidad de un segundo ataque cardíaco, accidente cerebrovascular e incluso de la muerte.
"Este estudio muestra que podríamos salvar vidas y reducir aún más los ataques cardíacos al administrar a los pacientes una combinación de dos medicamentos de bajo costo", afirmó el profesor Kausik RAY, de la Escuela Imperial de Salud Pública.
"Pero en este momento, los pacientes de todo el mundo no están tomando medicamentos juntos. Esto provoca ataques cardíacos y muertes innecesarias y prevenibles que podríamos haber evitado, y también genera costos innecesarios para los sistemas de atención médica", añadió.
Los medicamentos en cuestión son las estatinas y ezetimiba— dirigido a reducir el colesterol— los cuales se administraron aparte de los pacientes que participaron en el estudio, quienes tuvieron después mejores resultados que aquellos que no lo consumieron.
Según explicó secardiologia.es, "la terapia combinada con estatinas y ezetimiba es efectiva en base a los mecanismos de acción complementarios y consigue reducciones sustanciales de cLDL, sin aumentar los efectos secundarios. Su uso está indicado siempre que no consigamos el objetivo de cLDL, aparezcan efectos secundarios o interacciones con estatinas, tras un SCA y en la hipercolesterolemia familiar heterocigótica".
De este modo, el estudio, publicado en la revista Journal of the American College of Cardiology, aseguró que en el supuesto de que el 100% de los pacientes recibiesen la combinación de ambos medicamentos tras padecer un infarto, se podrían evitar al menos 133 infartos por cada 10.000 pacientes en solo tres años.
