Elías Pereyra acaba de firmar su primer contrato profesional con el club argentino San Lorenzo de Almagro tras superar una leucemia que se le diagnosticó en 2012.
Francesco Totti no es sólo el capitán de la AS Roma, sino el símbolo del club y de la ciudad. Hablar de Totti, más allá de su talento en el terreno de juego, es hablar de la fidelidad y el amor por un equipo. Son muchos los clubes que lo han buscado, que han intentado cubrirlo de dinero y trofeos, pero el amor a su club ha podido con todo.
La expectación en la gala del Balón de Oro 2016 se ausentó como en una carrera de Usain Bolt: los mejores tienen eso, que no dan para previa. Un premio que selecciona al mejor jugador del mundo puede ser noticia, pero para lo que no se pensó es para lo que de hecho fue: un mero trámite.
Como ocurrió en en la Primera Guerra Mundial, en el mundo del fútbol tenemos un conflicto multilateral con diversidad de temas conflictivos, un acontecimiento que provoca la explosión del conflicto y, por último, un elemento personal que complica la negociación entre las partes: la animadversión entre ellas.