Un imprevisto geográfico rompe el plan de la alta velocidad Madrid-Cádiz en tres horas y media
Allá por 1992 existía el compromiso del Gobierno de cubrir esta distancia en tan corto tiempo.

En el horizonte, una promesa: la de la llegada de la Alta Velocidad a Cádiz y un viaje de tres horas y media a Madrid. Ese era el objetivo que se propuso en 1992, pero la realidad es que esto no ha pasado: no hay AVE y los viajes hasta la capital son de cinco horas.
Pero no todo es oscuro, tal y como informa el Diario de Cádiz, "la puesta en funcionamiento del nuevo sistema de seguridad ferroviaria ERMTS entre Cádiz y Sevilla, con las obras ya listas y la autorización para su puesta en uso de la Agencia Estatal de Seguridad, debería de suponer un paso para la mejora de los horarios de los trenes". Está también la esperanza de que entre, en principio en 2026, la línea AVE entre Sevilla y Madrid y la llegada de los trenes Avril, más rápidos que los actuales Alvia, e incluso de los de la Serie 107, que podrían llegar a la Bahía a finales del año.
Pero hay algo que puede retrasar todavía más los planes de rapidez: frente a buena parte de España, cuando se renovó la red ferroviaria entre Cádiz y Sevilla, con la doble vía y una inversión de unos 1.100 millones de euros, no se planteó utilizar un paso exclusivo para el AVE. A esto se le suma, tal y como informa este diario, la configuración geográfica de la Bahía de Cádiz, que obliga a un trazado en curva entre El Puerto y Cádiz, con paradas relevantes (porque todas mueven a miles de pasajeros) en Puerto Real y San Fernando. Por eso los trenes se ven obligados a reducir su velocidad "tanto al ir en curva como por el proceso de llegada y salida a estas estaciones". Un problema imposible de solucionar.
