Un ingeniero advierte sobre el truco de moda para evitar perder calor en el hogar en invierno
A veces más puede ser menos.

Más, a veces, puede ser menos. Cuando hablamos sobre las distintas formas de ahorrar algo de dinero en la factura de la luz a la hora de calentar nuestro hogar, una de las primeras opciones que puede venirnos a la mente puede ser las ventanas de doble o triple acristalamiento.
Sin embargo, tal y como muestran en esta publicación local de Dinamarca, este planteamiento, lejos de ser cierto, puede estar bastante equivocado. Y es que, si se calcula el coste total de la instalación de este tipo de ventanas y se compara con el ahorro total que nos ahorramos en la factura de la luz, la diferencia es bastante notable.
Según explica Luca Arenz, consultor energético y director gerente de una empresa de ingeniería especializada en física de la construcción, en un video de Youtube, los plazos de amortización suelen ser bastante más largos en la gran mayoría de casos, por lo que no resultan una opción bastante efectiva.
Arenz, quien realiza, el cálculo total, estima que reemplazar un metro cuadrado de ventana puede costar unos 450€, por lo que para amortizar la inversión en 20 años los costes de la calefacción ahorrados tendrían que ser de unos 22,20 euros. En el supuesto de que la casa necesitase 20 metros cuadrados de ventanas, con el mismo periodo de amortización, necesitaríamos unos 450 euros al año en costes de calefacción, algo que no es muy realista.
Además, la luz del sol no traspasa tan bien cuando hay triple ventana que cuando hay doble o una, por lo que también es otro aspecto a tener en cuenta, especialmente si se quiere ahorrar algo de dinero. A pesar de ello, el experto aclara que todo dependerá de cada caso, pues si se nos han roto las ventanas o se quieren optar por unas más grandes quizás sí que nos interese.
