El yoga facial promete rejuvenecer la cara: lo que dice la ciencia sobre la moda del momento y lo que hay detrás
¿Funciona realmente?

En redes sociales se han popularizado los vídeos sobre yoga facial, con ejercicios y masajes que se pueden hacer en el rostro, supuestamente, para lograr que tenga un aspecto más lozano, para prevenir la flacidez y para reducir la hinchazón.
Muchos de ellos prometen resultados como eliminar la papada, las líneas de marioneta o las arrugas, pero ¿cuánta verdad hay tras ello?
En un artículo en SRF, una profesora de yoga facial en Suiza, Tamara Golliez, explica que no se puede pretender tener un rostro de 15 años si se tienen 60 y que esta práctica no detiene el envejecimiento de la piel, pero argumenta que si se entrenan los músculos faciales, rellenarán más el rostro.
Al estimular la circulación sanguínea y el sistema linfático, sus defensores aseguran que mejora la flacidez.
¿Y qué dicen los expertos en salud? "El efecto antienvejecimiento del yoga facial aún no ha sido suficientemente demostrado científicamente", recuerdan en la citada página.
"Sólo un pequeño estudio realizado en EE.UU. muestra resultados positivos", indican. En él, durante cinco meses varias mujeres de entre 40 y 65 años lo practicaron regularmente.
"Los médicos estimaron entonces que los participantes eran alrededor de tres años más jóvenes basándose en fotografías de antes y después. Sin embargo, sólo 16 mujeres permanecieron hasta el final del estudio. No se puede descartar que el efecto rejuvenecedor tenga otras razones", agregan.
