Una rodaja de esta fruta en el café matutino es suficiente para ir todos los días al baño como un reloj
No es un remedio milagroso, pero sí un buen aliado para la digestión.
El café, una de las bebidas más consumidas del mundo, es mucho más que un ritual matutino. Detrás de cada taza hay una combinación de aroma, energía y tradición que acompaña a millones de personas en todo el mundo. Tomado con moderación —como ocurre con casi todo en la vida—, el café ofrece múltiples beneficios que van mucho más allá de mantenernos despiertos.
Según la marca Nespresso, su contenido en cafeína —un potente estimulante natural del sistema nervioso central— ayuda a aumentar la energía, mejorar la concentración y mantener la alerta mental durante horas. Por eso, una taza por la mañana no solo despierta, sino que también prepara al cerebro para un mejor rendimiento cognitivo y tiempos de reacción más rápidos.
Además de mantenernos despiertos, el café tiene efectos metabólicos notables. La cafeína activa el metabolismo, favorece la oxidación de grasas y estimula la producción de adrenalina, lo que puede mejorar el rendimiento físico incluso en reposo. Es decir, ayuda al cuerpo a consumir más energía y prepararse mejor para la actividad del día.
El café con un ingrediente especial
Ya son muchos los que han pasado del clásico café solo o con leche al café con limón. Añadir una fina rodaja a la taza realza el aroma, intensifica la acidez y aporta un toque cítrico que, además de refrescar el paladar, puede ayudar a activar el sistema digestivo.
Según los expertos, la combinación de cafeína y bebida caliente estimula el peristaltismo intestinal, ayudando a que los intestinos funcionen con regularidad. El limón, por su parte, incorpora aceites esenciales y una pequeña dosis de vitamina C que complementan el efecto energizante del café.
Cómo afecta realmente al organismo
El café con limón no es un remedio milagroso, pero sí un buen aliado para la digestión. La cafeína estimula el tránsito intestinal, mientras que el calor de la bebida relaja el sistema digestivo. El toque cítrico añade frescura y puede tener un ligero efecto procinético, es decir, ayuda al movimiento natural del intestino.
Eso sí, no existen pruebas de que “desintoxique” el cuerpo ya que ningún alimento lo hace por sí solo. El hígado sigue siendo el verdadero protagonista de la depuración natural del organismo.
Cuándo disfrutarlo y cuándo evitarlo
El café con limón es ideal para quienes disfrutan de los sabores ácidos. Sin embargo, no se recomienda en personas con reflujo, gastritis o estómago sensible, ya que la combinación de cafeína y ácido cítrico puede resultar irritante. Tampoco debe mezclarse con leche (se corta) ni tomarse en exceso si hay deficiencia de hierro, ya que el café puede dificultar su absorción.
Cómo preparar un café con limón perfecto
Según explica el creador de contenido @Sebasfitnutricion en TikTok, la receta no tiene ningún misterio. Basta con preparar el café como de costumbre y, una vez listo, añadirle dos cucharadas de zumo de limón natural recién exprimido.
No necesita azúcar ni miel, el encanto de esta bebida está en el contraste entre el amargor del café y la acidez del limón. Ligera, baja en calorías y estimulante, esta combinación puede convertirse en el complemento ideal de tu rutina matinal.