Alerta en aduanas por la detección del insecticida eficaz contra chinches y garrapatas, pero letal para los humanos

Existen numerosos insecticidas para mantener lejos a las chinches y garrapatas, sin embargo, no todos son recomendables. Un ejemplo de ello es las recientes incautaciones de "Sniper 1.000" que han ido incrementándose desde el inicio del año en Francia, provocando la alarma entre las autoridades francesas.  

Concretamente, en el aeropuerto de Roissy, las autoridades aduaneras descubrieron este insecticida en las maletas de varios viajeros, así como en envíos de carga y paquetes postales en Wissous, Essonne. Los agentes de la dirección de fraudes interceptaron cientos de frascos, bajo un precio de unos 20 euros cada uno, en mercados, bazares y plataformas de comercio en línea. 

Según François Sobry, portavoz de la DGCCRF, la región de Île-de-France es la más afectada, con cerca de 3.000 frascos confiscados. Este producto es ilegal debido a su contenido altamente tóxico, y un solo frasco puede resultar letal. Desde el resurgimiento de las chinches en 2018, los casos de intoxicación han aumentado, con más de cien incidentes reportados y tres muertes, a pesar de que su venta está prohibida desde 2013.

"El diclorvos es una sustancia tóxica por inhalación, ingestión o simple contacto con la piel, precisa François Sobry, por lo que se recomienda encarecidamente a los consumidores que puedan ver este producto en un comercio ilegal, mantenernos alejados de él", ya que "una sola botella puede resultar mortal". 

La mayoría de las intoxicaciones se produjeron al usar el producto en casa para combatir plagas, afectando tanto a adultos como a niños, y en algunos casos se reportaron intentos de suicidio.

Cabe destacar que para que un biocida sea comercializado en la UE, debe pasar por un estricto proceso de evaluación y autorización, lo que incluye la aprobación de la sustancia activa y la demostración de su eficacia y seguridad.

¿Qué pueden hacerte las chinches y garrapatas? 

Las chinches pueden ser portadores de virus; sin embargo, pocas veces trasmiten patógenos a los humanos. Sus picaduras, aunque indoloras, pueden producir una reacción alérgica que puede aparecer hasta nueve días después. 

No pueden volar y suelen esconderse en lugares con poca luz, como los pliegues de los colchones. Además, suelen optar por el equipaje de tela antes que por el de plástico o metal. Suelen detectarse con mayor facilidad en colores claros con la linterna del móvil. 

Las garrapatas pueden encontrarse en la hierba y arbustos de todos los continentes, menos en la Antártida. No pueden saltar ni volar, aunque pueden trepar velozmente a una persona que pase cerca. Cuando comen se fijan en su sitio con un arpón de púas en la piel, lo que impide o dificulta su eliminación. 

Sus picaduras suelen ser indoloras y pueden ser confundidas con las de un mosquito. Existen diferencias entre las distintas especies, que portan distintos patógenos infecciosos. Un ejemplo es la enfermedad de Lyme, que afecta a unas 476.000 personas al año sólo en Estados Unidos.