Ni Disneyland Barcelona ni Valencia: la razón por la que España se quedó sin este parque temático
La atracción turística de la capital francesa y el hecho de ser un destino líder en el mundo tuvieron mucho peso.
Cuentan que fue en el último momento. La decisión no era la esperada, al menos desde España. Fue cuando The Walt Disney Company buscaba, en los años ochenta, crear un parque temático en Europa, similar a los que ya se encontraban en Estados Unidos. Buscaba un lugar estratégico y accesible, para todos aquellos europeos que, ante la dificultad de cruzar el Atlántico, pudieran tener la oportunidad de disfrutar de atracciones de temática de Disney en territorio europeo.
Se barajon lugares que hubieran sido muy apropiados, por su ubicación y por el clima, como Valencia, Castellón, Alicante y Tarragona. Incluso sonaron ciudades andaluzas como Almería, Málaga y Jerez e incluso Barcelona o Almería. Todo el mundo parecía pensar que España era el lugar idóneo para situarlo y parece ser que la mayoría de los directivos de la compañía que estaban al frente del proyecto preferían nuestro país como opción para crear Eurodisney.
El porqué se eligió finalmente París, la capital francesa, en concreto la localidad cercana de Marne-la-Vallée, que está a unos 32 kilómetros de la gran urbe, por su proximidad a una de las mayores concentraciones de población europea, su infraestructura de transporte y su atractivo turístico, así por la densidad de población del país galo.
Cierto es que Francia sigue siendo el país más visitado del mundo a día de hoy y que París no suele faltar en ninguno de los destinos de esos viajeros, pero España es el segundo, lo que no está nada mal. Pero cuando se tomó aquella decisión, a finales del siglo pasado, quizás las diferencias turísticas y de infraestructuras eran mucho más notables como para que la balanza se inclina por nuestro país vecino.