Avisan de la travesía de jubilados europeos en Marruecos: "Es una auténtica migración"
El interés por el país africano ha ganado numerosos adeptos por motivos evidentes.

Con el paso de los años, Marruecos se ha convertido en un país más que deseable para infinidad de turistas de todo el mundo, particularmente europeos, que ven en el reino alauí un lugar en el que descansar y desconectar de la ajetreada vida del Viejo Continente y a un precio inferior.
El proceso de modernización y adaptación del país en todos los ámbitos ha permitido que infinidad de personas de todo el mundo quiera visitarlo, ya que compagina el entorno tradicional de un país musulmán con el nuevo mundo. Y esto se está notando, y de qué manera.
Y es que, en los últimos años, Marruecos ha experimentado un incremento más que significativo en las cifras de turistas que visitan el país para enamorarse de sus calles, medinas y paisajes, y eso se está notando principalmente en un grupo concreto de personas: los jubilados europeos.
Este colectivo se ha convertido en uno de los que más viajes realizan a Marruecos por varios motivos: la cercanía, el inferior coste de la vida y el calor. Y más si cabe en el caso de los franceses, que además comparten idioma con muchos marroquís que dominan el francés a la perfección.
Así, se encuentran infinidad de casos de parejas de jubilados que buscan retiros de media o larga duración en Marruecos con el objetivo de disfrutar al máximo de una vida mucho más contemplativa y lejos del estrés de las grandes ciudades europeas, como en este caso pueden ser las de Francia.
Muchos de ellos, en su intento de encontrar un lugar más tranquilo deciden irse de camping, a precios menores que en Francia y con todo tipo de comodidades. Esto ha sido recogido por varios medios franceses, que se han hecho eco de las historias de algunos de sus compatriotas, que han optado por esta decisión.
"Este es el caso de Michel y Therese-Marie, franceses de Brest que decidieron huir de las grandes ciudades francesas para irse a un camping de Agadir, regentado por Patrice, un hombre que abrió junto a su mujer un camping en la ciudad marroquí hace unos años y ahora esa inversión se ha convertido en todo un éxito: "Es realmente una migración", afirma.
Pero esta pareja de franceses jubilados no es la única -ni mucho menos- que tiene ese plan. Y según datos de algunos portales, se estima que hay unos 30.000 jubilados franceses que deciden irse a Marruecos en invierno para alejarse del frío de Francia.
