Claudia, propietaria de un apartamento de 50.000 euros, obligada a poner cubos por las goteras: "Por la noche la niña tropieza a menudo"
Esta casa es una ruina...
Esta casa es una ruina. Un apartamento nuevo, comprado a crédito, se ha convertido en una verdadera pesadilla para una familia en Cluj, una ciudad al noroeste de Rumania. En declaraciones recogidas por el medio de comunicación Liber Tatea, Claudia, su propietaria, ha contado que los problemas surgieron poco después de firmar la venta, de 50.000 euros, durante la primavera de 2020.
"Unos meses después de comprar el apartamento, lo pinté y empezaron a aparecer pequeñas manchas. Vinieron los técnicos, lo vieron, e incluso después de terminar las reparaciones, bajaron y me mostraron que seguía saliendo agua", asegura, claramente afectada, la madre de familia.
Tal y como recoge el periódico, las goteras afectan a casi todos los rincones de la vivienda, y cambiar los cristales dos veces "no solucionó el problema". "Este cristal ya lo he cambiado dos veces, pero de nada sirve cambiarlo hasta que esté arreglado el edificio", crítica.
"A mí también me gustaría entrar en casa para no tener más problemas, para estar tranquila, por la noche la niña tropieza a menudo con los cuencos", asegura. La mujer presentó una demanda para identificar a los culpables y el tribunal permitió que se realizara un examen técnico, sin éxito.
Según ella, un experto llegó al apartamento, "nos dijo qué hacer como administración, pero no podíamos intervenir mucho. Hicimos exactamente lo que nos indicó, pero el problema no se solucionó". De este modo, opina que si la Inspección Estatal de Construcción del país en Europa del este hubiera realizado inspecciones reales en el lugar antes de la puesta en funcionamiento del edificio, nada de esto hubiera pasado.