El dueño de una empresa construye un barrio de 41 casas para atraer a nuevos empleados de la zona: "Representa una ventaja estratégica"
La compañía cuenta con 550 trabajadores.

Encontrar vivienda se ha convertido en un reto cada vez más complejo no solo en las grandes ciudades, donde los precios se disparan y la competencia entre inquilinos es feroz. La demanda no deja de crecer lo que genera una presión constante sobre un mercado inmobiliario que no logra dar respuesta suficiente.
En Beignon, una localidad de apenas 2.000 habitantes situada entre Morbihan e Ille-et-Vilaine, en la región de Bretaña (Francia), el problema se ha convertido en un obstáculo directo para el desarrollo empresarial.
Allí, el dueño de FenêtréA, una empresa especializada en carpintería y acabados de interiores, ha tomado una decisión innovadora. Se trata de construir un barrio de 41 viviendas para garantizar alojamiento a sus empleados y futuros colaboradores.
Un barrio para sus trabajadores
El proyecto, bautizado como Horizon Brocéliande, surge en un contexto en el que cada vivienda disponible en el municipio recibe hasta 200 solicitudes. La falta de oferta hace que atraer nuevos trabajadores sea cada vez más complicado.
“Nuestros empleados deben poder vivir en un radio de 25 kilómetros de la empresa, porque más allá de este radio corremos el riesgo de perderlos debido al precio de la gasolina y al cansancio de los desplazamientos”, explica Dominique Lamballe, propietario de FenêtréA.
La compañía, que cuenta con 550 trabajadores y factura más de 80 millones de euros anuales, contrata cada año entre 20 y 50 personas. Sin embargo, la situación de la vivienda amenaza con frenar su crecimiento, especialmente de cara a la apertura de una nueva fábrica en 2027 que generará alrededor de 100 nuevos puestos de trabajo.
Con prioridad para los empleados
El complejo residencial contempla la construcción de 41 casas unifamiliares que se ofrecerán tanto en alquiler como en venta “a precio de mercado”. El objetivo no es obtener beneficios inmobiliarios, sino proporcionar soluciones reales para los trabajadores. “No se trata de convertirnos en promotores, sino de asegurar que nuestros empleados tengan un lugar donde vivir. Es una ventaja estratégica que fortalece la empresa y la región”, subraya Lamballe.
Las primeras 12 viviendas ya están en construcción y se entregarán en primavera. En 2025 se sumarán otras 12, y las 17 restantes estarán listas en 2027, coincidiendo con la inauguración de la nueva planta de producción. El proyecto ha sido posible gracias a un acuerdo con el ayuntamiento, que vendió a la empresa un terreno de 10.900 m² al no contar con presupuesto suficiente para desarrollar una urbanización de este tamaño.
