En una ciudad andaluza ponen coto a los imanes eróticos: "Perpetúan estereotipos sexistas y banaliza la violencia contra la mujer"
Unos souvenirs que afectan a la dignidad de las mujeres.

Hace tan solo unas semanas, el Ayuntamiento de Málaga ordenó la retirada del escaparate de una tienda de souvenirs en plena calle Nueva, una de las más transitadas del centro histórico de la ciudad. ¿El motivo? Entre bolsos, abanicos y postales se vendían una serie de imanes con imágenes sexualizadas de mujeres desnudas, con los pechos al descubierto y la palabra Málaga estampada en letras grandes.
Según el Consistorio, los artículos vulneraban la normativa local sobre convivencia y podían contribuir a la normalización de estereotipos y conductas que afectan a la dignidad de las mujeres. “Ni tiene que ver con la ciudad ni me parece lo más bonito para poner en una de las calles más vistosas y turísticas. No es un souvenir de Málaga. Está fuera de lugar y no tiene nada que ver con ella”, explicó la concejal responsable de Comercio y Gestión de Vía Pública, Elisa Pérez (PP) en declaraciones recogidas por Málaga Hoy.
Esto ha sido posible gracias a una denuncia trasladada por el Equipo de Atención a la Mujer (EAM) ante el Observatorio de Publicidad Sexista del Instituto de las Mujeres, dependiente del Ministerio de Igualdad, al considerar que la exposición de estos artículos constituía un ejemplo claro de publicidad sexista. El Ayuntamiento basó la intervención en la Ordenanza para la Garantía de la Convivencia Ciudadana.
Una realidad muy grave
Los imanes, que mostraban figuras femeninas en bikini o en actitudes exhibicionistas mostrando el trasero y los pechos, se exponían en una de las vías peatonales más concurridas del centro histórico. El EAM comprobó la presencia del producto in situ y remitió un oficio solicitando la incoación de expediente sancionador ante el Servicio de Consumo, porque considera que estos imanes atentan contra la dignidad de las mujeres.
"No es un juego ni un souvenir inocente, perpetúan estereotipos sexistas, banalizan la violencia contra las mujeres y contribuyen a normalizar la explotación sexual", declaró. Los responsables de la tienda consultados defienden que el producto es el más vendido del establecimiento y que, hasta la denuncia, no habían recibido reclamaciones de clientes. “La gente se ríe con ellos y los toca”, explicaron al citado medio.
El comercio mantiene que atiende una demanda del mercado y que no pretendía ofender. No obstante, el EAM se mantiene firme en su denuncia. “Detrás de estos productos se encuentra una realidad grave: muchas mujeres son víctimas de explotación sexual y trata”, apuntan desde la unidad defendiendo que su exhibición en un escaparate público contribuye a cosificar a las mujeres y a banalizar la violencia que sufren. “No hay que normalizar este tipo de prácticas, detrás de cada producto hay personas y derechos que se ven vulnerados”, denuncian.
