El impacto de la ola de calor: 1.149 muertes atribuibles a las altas temperaturas en los últimos 16 días
En lo que va de verano, se atribuyen al calor 2.635 fallecimientos, un 40% más que en 2024.

La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha dado por concluida la ola de calor que comenzó el pasado 3 de agosto y que ha dejado serios estragos. El Sistema de Monitorización de la Mortalidad Diaria (MoMo) calcula que, durante los 16 días que ha durado, se han producido 1.149 muertes atribuibles a las altas temperaturas.
Las estadísticas reflejan también que hubo varios jornadas en las que se superaron los 100 fallecimientos. El día más crítico fue el domingo 17 de agosto, con 125 muertes, seguido del sábado 16, con 113.
Las cifras de agosto ya han superado las de todo julio, que sumó 1.060 muertes por calor. En junio se contabilizaron 407 fallecimientos, 12 veces más que el mismo mes de 2024, y en la segunda quincena de mayo fueron 8.
En total, desde el inicio del verano, se han producido 2.635 muertes atribuibles al calor extremo, un 40% más que en el mismo periodo de 2024.
Personas mayores y mujeres, las más afectadas
La mayoría de las víctimas fueron personas mayores de 65 años (2.529), especialmente mayores de 75 (2.347), de las cuales 1.747 tenían 85 o más años, estima MoMo para este periodo estival, que comprende del 15 de mayo al 30 de septiembre, coincidiendo con el tiempo que el Ministerio de Sanidad mantiene activo el Plan Nacional de Actuaciones Preventivas de los Efectos del Exceso de Temperatura sobre la Salud. Por ello los expertos aconsejas prestar especial atención a este grupo poblacional durante la época estival.
Por sexos, 1.579 eran mujeres frente a 1.056 hombres, según este sistema que no realiza sus cálculos en base a muertes reales, sino que realiza una proyección estadística cruzando información de mortalidad con los umbrales de temperaturas máximas que representan un riesgo para la salud, comparándolos además con los del año anterior.
Al menos 23 golpes de calor mortales
Aunque la mayoría de los decesos se deben a la agravación de enfermedades previas, el calor también puede causar la muerte de forma directa. Este verano, al menos 23 personas han fallecido por golpe de calor, cuatro de ellas mientras trabajaban. Esta cifra ya supera las muertes por esta causa del verano pasado (17) y de 2022 (20), y se acerca al verano más letal, 2023 (24).
Con más de mes y medio todavía por delante hasta que finalice el periodo estival, las autoridades sanitarias alertan sobre los riesgos de los días más calurosos, que ya han dejado casi la mitad de todas las muertes por calor en apenas 16 días de agosto.
¿En qué consiste el sistema MoMo?
El Ministerio de Sanidad explica que MoMo ha sido creado creado para vigilar la mortalidad por todas las causas y su relación con los excesos de temperatura, en el marco del Plan Calor. Este sistema se implementa en la Unidad de Vigilancia de la Mortalidad Diaria del Centro Nacional de Epidemiología (CNE) del Instituto de Salud Carlos III, y permite "contribuir a la planificación de medidas preventivas frente a los efectos del calor sobre la salud".
MoMo analiza información procedente de tres fuentes principales:
- Los datos de defunciones diarias por todas las causas de los últimos diez años, excepto 2020, del Instituto Nacional de Estadística (INE).
- Las defunciones recientes registradas por el Ministerio de Justicia en 4.128 municipios, que abarcan aproximadamente el 93% de la población española.
- Los datos de temperaturas máximas y mínimas proporcionados por la AEMET.
Además, se tiene en cuenta la población española por grupo de edad y provincia, lo que permite ofrecer una vigilancia detallada y precisa de los riesgos de mortalidad asociados a las olas de calor.
Por otra parte, el sistema "incluye dos modelos diferentes para ofrecer información de excesos de mortalidad por todas las causas y atribuibles al exceso o defecto de temperatur". Para ello, aplica dos enfoques diferentes.
Por un lado, el enfoque predictivo proporciona"predicciones del riesgo de mortalidad atribuible a exceso o defecto de temperatura para el día en curso y los siguientes cinco días". Este se basa en el Índice Kairós, un indicador tipo semáforo que "proporciona diariamente tres niveles de riesgo de mortalidad atribuible a temperatura, en función del valor de la probabilidad de este riesgo".
Por otro, el enfoque estimativo ofrece "estimaciones diarias del número de excesos de defunciones por todas las causas y atribuibles al exceso o defecto de temperatura", desglosadas por ámbito geográfico, sexo y grupo de edad, y se muestra a través del Panel MoMo.
