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Los embalses españoles vigilan la línea roja en los últimos días de enero

Los embalses españoles vigilan la línea roja en los últimos días de enero

Los niveles de agua son casi idénticos a la media histórica.

El embalse de Ulldecona, en el sur de Cataluña.NurPhoto via Getty Images

Los embalses españoles atraviesan una situación delicada. La reserva hídrica se encuentra al 52% de su capacidad total, almacenando actualmente 29.142 hectómetros cúbicos (hm³) de agua, según los últimos datos del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco). En la última semana, los embalses han disminuido 324 hm³, lo que representa una reducción del 0,6% respecto a la capacidad total actual, que es de 56.039 hm³

Comparado con el mismo período de 2024, la cifra actual es notablemente superior, ya que el 20 de enero de 2024 los embalses contenían 25.356 hm³ (45,25% de su capacidad). Sin embargo, si se observa la media de los últimos diez años para esta misma semana, los niveles de agua son casi idénticos a la media histórica (29.384 hm³ y 52,43%), lo que resalta la irregularidad de las precipitaciones de este año.

El año hidrológico que comenzó en octubre está siendo uno de los más secos de las últimas décadas en España, señala la meteoróloga de Eltiempo.es Mar Gómez. Las precipitaciones acumuladas se sitúan muy por debajo de la media histórica, lo que ha generado un importante estrés hídrico, especialmente en las cuencas más vulnerables, como las del sur y sureste de la península. 

Las lluvias han sido "escasas e irregulares", con noviembre marcando un mes extremadamente seco, ya que las precipitaciones fueron solo el 48% de la media del mes. Diciembre, por su parte, se posicionó como el segundo mes de diciembre más seco del siglo XXI.

Este déficit de precipitaciones se ve agravado por un contexto climático caracterizado por temperaturas más altas de lo habitual, lo que favorece la evaporación y reduce la capacidad de almacenamiento de agua en los ecosistemas naturales. Este fenómeno está afectando tanto a la cantidad de agua disponible como a la calidad de los recursos hídricos en varias zonas del país.

El impacto de la borrasca Garoé

Afortunadamente, está previsto que la situación mejore ligeramente en los próximos días gracias a los efectos de la borrasca Garoé, que está dejando precipitaciones por todo el país, especialmente en el oeste peninsular. Esta borrasca podría incrementar las reservas hídricas de manera moderada, aunque no se espera que sea suficiente para compensar el déficit acumulado en lo que va de año hidrológico.

Para que los embalses puedan alcanzar niveles adecuados de cara al próximo verano se estima que serían necesarios entre 150 mm y 300 mm de lluvia en las principales cuencas hidrográficas, como las de Guadalquivir, Guadiana, Segura o Júcar. Este volumen de agua equivale a aproximadamente al 150% de lo que habitualmente se registra en primavera en algunas de estas zonas.