Un conductor se gasta más de 100.000 euros en un Mercedes de lujo y el sustazo llega al comprobar los frenos
El mecánico avisó de inmediato a las autoridades.

Despues de gastar más de 110.000 euros en un Mercedes GLE 400, cuyo precio en España parte de 97.375,14 euros, lo mínimo que se puede esperar es disfrutar de un rendimiento excepcional, comodidad absoluta y plena seguridad. Sin embargo, para un conductor alemán de Ludwigsburg, la experiencia fue completamente opuesta.
Pocos días después de adquirir su vehículo a través de una plataforma de subastas online, el comprador comenzó a notar que los frenos no respondían como deberían, con lo que acudió a un taller para encontrar el problema. Allí, el mecánico descubrió algo tan increíble como peligroso: las pastillas de freno habían sido sustituidas por trozos de madera, e incluso llevaban grabado el logotipo falsificado de la marca Brembo.
El mecánico, sorprendido por la magnitud del fraude, notificó de inmediato el caso a las autoridades de Vaihingen, que confiscaron las piezas manipuladas, recoge el medio Automoto. Según los medios locales, "la escena era insólita: incluso se veían restos de serrín en las ruedas delanteras", una pista que llevó a destapar la estafa.
Afortunadamente, nadie resultó herido. Pero el episodio volvió a poner de manifiesto los peligros del mercado de coches usados en internet, donde no siempre se verifica el origen, la autenticidad ni el estado de los vehículos que se ofertan.
Cómo detectar una tienda o subasta online fraudulenta
Tras el hallazgo, los nuevos propietarios del Mercedes presentaron una denuncia por manipulación de componentes de seguridad, un delito grave que puede tener graves consecuencias. El caso no es aislado. Según las autoridades alemanas, este tipo de engaños se ha multiplicado en los últimos años, impulsado por la expansión del comercio digital y la creciente confianza de los consumidores en las compras por internet.
Por ello, en el competitivo mercado de los vehículos de segunda mano, la prudencia es la mejor aliada de compradores y vendedores. La plataforma Autocasión advierte de que es fundamental prestar atención a cualquier indicio de irregularidad: "Si hay duda, es que no hay duda".
El anonimato que ofrece internet, aunque facilita el contacto entre particulares, también abre la puerta a engaños. Por ello, Autocasión recomienda seguir estos consejos si se quiere comprar un coche de segunda mano:
- Verifica datos personales. Comprobar nombres, direcciones y números de teléfono de vendedores o compradores.
- Revisa las fotos del anuncio. Si el coche supuestamente está en un país, pero las matrículas o carteles corresponden a otro, sospecha.
- Observa la coherencia en las imágenes de concesionarios. Las fotos deberían estar tomadas en las mismas instalaciones.
- Detecta incongruencias en las respuestas. Las mentiras suelen caer por contradicciones.
- Comprueba nombres, teléfonos y correos en buscadores. Si no aparece nada sobre esa persona o empresa, desconfía.
- Evita WhatsApp y mensajería instantánea. Intenta siempre hablar por teléfono con el vendedor o comprador.
- No aceptes cheques como forma de pago.
- Nunca envíes dinero por adelantado por Bizum u otros métodos.
- Desconfía de precios demasiado bajos o de compradores que ofrezcan más dinero del solicitado.
Qué hacer si ya has comprado
La vigilancia no termina con el pago. Una vez realizada la compra, aunque la plataforma de compra parezca legal, es importante eliminar los datos de pago almacenados, cerrar la sesión, comprobar el seguimiento del pedido y revisar que los cargos bancarios sean correctos. También es recomendable conservar una copia del recibo o factura, que servirá de prueba ante cualquier reclamación.
El caso del Mercedes falsificado demuestra que el fraude online no entiende de sectores ni de precios. Desde coches de lujo hasta productos cotidianos, cualquier compra puede convertirse en una estafa si no se toman precauciones.
