Al juez Castro le preguntan por lo que dijo Ayuso sobre el aborto y dicta sentencia con su respuesta

El juez José Castro, que ingresó en la carrera judicial en el año 1976, se hizo conocido tras ser el magistrado que instruyó la causa contra el expresidente del Gobierno balear, Jaume Matas. Posteriormente, fue en el encargado de la instrucción del Caso Nóos y el primer juez en la historia de España en imputar a un miembro de la Casa Real, la infanta Cristina de Borbón.
Este sábado, ha sido entrevistado en el programa de José Yélamo en LaSexta, LaSexta Xplica, y no ha dudado en contestar a las palabras que la presidenta de la Comunidad de Madrid y dirigente del PP madrileño, Isabel Díaz Ayuso, pronunció hace unas semanas sobre el aborto. "Váyanse a otro lado a abortar", aseguró, en tono de crítica contra la oposición.
"A mí la reflexión que haga la señora Ayuso, desde su óptica personal, desde su peculiar moralidad católica, me parece bien. Que entiende que han abortado un millón y pico, que no sé la cifra cuál será, pues me parece que, si ella lo entiende lamentable, pues que se lamente de ello. Eso pertenece a la moral peculiar de la señora Ayuso", ha señalado, en primer término.
Pero el juez Castro no ha dudado en echarle algo en cara: "Ahora, que esta señora se niegue a acatar las previsiones de una ley que ordena a cada comunidad autónoma hacer un listado médico de objetores de conciencia, no para publicarlo, no para difundirlo, no para estigmatizar a ninguno de los componentes de esa lista y que se niegue a cumplirlo me parece una crasa desobediencia de la ley, pero a la que ya estamos acostumbrados por esta señora. Otra cosa no me cabe decir. No espero otra cosa de la señora Ayuso".
Al mostrarle las palabras del pasado jueves con las que la presidenta madrileña acusaba al Gobierno de pretender levantar "las dos Españas" y "retrotraernos a las trincheras del guerracivilismo" con lo que está haciendo en la Real Casa de Correos de Madrid, reconocido desde este 22 de octubre como un Lugar de Memoria Democrática por las torturas durante el franquismo.
"Cuando nos referimos a la represión franquista yo ya no me refiero a la propia contienda en sí, sino cuando se acabó la Guerra Civil. Cualquier asesinato o barbaridad ya no estaba justificada. No es que yo entendiera que antes lo pudieran estar, pero se podía entender que, en el marco de una guerra, barbaridades hacen unos y barbaridades hacen otros", ha señalado.
"Pero una vez acabada la contienda, me parece monstruoso que el gobierno franquista siguiera haciendo purgas, fusilando. Eso no lo hicieron los que perdieron la guerra. Unos murieron y otros quedaron exiliados. Los únicos que lo hicieron pertenecían a la dictadura franquista. Creo que esto lo debieran de saber y asumir todos", ha sentenciado.
