Los expertos revelan cada cuánto deberías lavar las toallas de la playa: no hacerlo puede ser un problema
Para evitar llevarse un susto este verano.
No hay bolsa de la playa sin toalla que se precie, ya que las largas jornadas de verano en el mar serían imposibles sin este accesorio. Cada día, las toallas se mojan con el agua del mar, cargada de salitre, y se manchan con los restos de crema solar, arena e incluso con algunos residuos si la playa no está tan limpia como debería.
Por eso es imprescindible lavarla asiduamente y no caer en la tentación de pasarse días metiéndola y sacándola de la bolsa o mochila para volver a utilizarla. De hecho, los expertos aseguran que no tenerla limpia puede llegar a provocar incluso problemas de salud.
La dermatóloga Hannah Kopelman explicó en una entrevista con la edición estadounidense de El HuffPost que "una toalla que se ha utilizado en varias ocasiones, especialmente cuando está húmeda, se convierte en un caldo de cultivo para las bacterias".
Los diferentes tipos de bacterias que pueden aparecer en las toallas pueden llegar a provocar infecciones o hongos, especialmente en personas con un sistema inmunitario comprometido o con algún problema en la piel. "Si tienes algunos cortes o incluso los folículos inflamados, las bacterias pueden aprovechar y provocar una infección. Puede convertirse en un problema médico", advirtió la dermatóloga.
Además, la doctora advierte de que ha atendido a pacientes con brotes de acné o eczema simplemente por utilizar toallas sucias. Por eso, es imprescindible mantenerlas limpias antes de utilizarlas en la playa. ¿Cada cuándo es ideal lavarlas? Según Kopelman, después de cada uso.
Si eso no es posible, la dermatóloga advierte de que no se deberían utilizar las toallas más de tres veces sin meterlas en la lavadora. Megan Meyer, especialista en microbiología, explicó a la edición estadounidense de El HuffPost que también es de la opinión de lavarla a diario y, si es posible, utilizar siempre toallas de algodón.
"Si es posible, utiliza una toalla limpia cada día o, como mucho, cada dos días, y permite que le de el aire colocándola de forma que reciba sol directo y se seque por completo. Elige toallas 100% algodón porque son más transpirables", recomienda la experta.
