El 2025 de Alice Campello y Álvaro Morata: se reconciliaron en enero y todo apunta a un final de año totalmente distanciados
La pareja termina el año haciendo frente a una nueva crisis en su matrimonio.

A finales de enero, la pareja formada por el futbolista Álvaro Morata y la 'influencer' italiana Alice Campello confirmaron su reconciliación tras hacer frente a una crisis en su relación que pilló por sorpresa a sus seguidores. Hasta ese momento habían formado una de las parejas más estables e idílicas del panorama rosa desde que se dieron el 'sí, quiero' en junio de 2017.
"Fue el error más grande que hemos cometido en nuestras vidas. Todos los días lo repetimos. No sé cómo pudimos tomar esa decisión", señalaba ella sobre esa ruptura en el programa italiano Verissimo de Canale 5. En esa entrevista además explicó que fue el delicado momento emocional y psicológico que ambos atravesaban lo que motivó el distanciamiento entre ellos.
Después de superar ese amargo bache, el 2025 parecía un año feliz y mágico para la pareja que disfrutaba de preciosos momentos junto a sus cuatro hijos. Pero los últimos movimientos y gestos de la influencer y el futbolista parecen demostrar los contrario y vaticinan un final de año agridulce para ellos. Ya lo dice el refrán: "Segundas partes nunca fueron buenas".
Las alarmas sobre un posible nuevo distanciamiento saltaron a principios de diciembre, cuando Campello acudió sola con sus hijos a la boda de una de sus mejores amigas en Oviedo. Y los rumores empezaron a cobrar fuerza cuando además se descubrió que ella ya no llevaba la alianza de casada en su dedo.
Y aunque los protagonistas ni confirman ni desmienten públicamente la crisis con la que parece que van a despedir el año, algunos gestos de la influencer en redes sociales son sintomáticos. En la ultimas horas ha subido algunas fotos de sus vacaciones navideñas en Dubai con sus hijos y junto al carrusel ha escrito: "Con mis cuatro corazones". De Morata, ni rastro en las imágenes ni en las menciones.
Parece que la crisis es incontestable, como publica en exclusiva la revista Semana este mismo martes que en un extenso reportaje muestra cómo la pareja, aunque comparte hogar, hace vidas separadas en Milán, la ciudad italiana en la que viven, y siempre pendientes de sus hijos.
