Aumenta la cantidad de cruceros especializados en juegos de mesa, wargames y miniaturas
Una fórmula que nace a mediados de la década pasada.

El turismo de cruceros ya no solo atrae a quienes buscan sol y playa, sino que en los últimos años se ha acelerado la aparición de cruceros diseñados específicamente para aficionados a los juegos de mesa, los wargames, las miniaturas y la cultura friki en general. Estas travesías convierten las cubiertas y salones del barco en convenciones flotantes donde se juega a todas horas, se imparten talleres, se celebran torneos y se organizan fiestas y actividades temáticas.
El fenómeno, que arrancó como una idea para trasladar la experiencia de las convenciones terrestres al mar, tiene su origen en proyectos estadounidenses como el Dice Tower Cruise y el Congress of Gamers. Ambos fueron creados para reproducir a bordo la dinámica de una convención de juegos con espacios dedicados y programación continua. Desde su puesta en marcha a mediados de la década pasada, la fórmula se ha consolidado y ampliado.
A partir de ese impulso inicial, la oferta se ha diversificado. Hoy en día hay grandes “ludotecas flotantes” pensadas para todo tipo de públicos, familias, grupos de amigos y jugadores casuales, pero también existen cruceros muy especializados. En los últimos años han nacido itinerarios centrados en wargames y miniaturas, cruceros para jugadores de rol con campañas continuas y sesiones de interpretación, e incluso travesías que combinan cosplay, cómic y cultura pop.
Convenciones en alta mar
Ejemplos de este abanico son las propuestas de Meeples at Sea, que publicitan amplios catálogos de juegos y espacios de juego permanentes, y cruceros de wargaming organizados por comunidades como Cruisehammer. La expansión no se limita a Estados Unidos, ya que en Europa han proliferado iniciativas como el Boardgame Cruise que adaptan el formato a mercados locales y rutas específicas, y organizadores alemanes y británicos han replicado la fórmula con éxito.
Paralelamente, en Latinoamérica se han celebrado varias ediciones regionales, como el Kriativos On Board, organizado en Brasil, que celebró su tercera edición en abril de 2025 a bordo del Costa Diadema. Congregó a más de 400 participantes, según recoge Xataka, consolidando la idea de que el formato funciona fuera del mercado anglosajón. El evento incorporó talleres, mesas redondas con diseñadores invitados y competiciones que ocuparon prácticamente toda la travesía.
El éxito de estos cruceros se debe en gran parte a su componente social. Los jugadores valoran cada vez más las experiencias compartidas y el tiempo intenso dedicado a sus aficiones fuera de la rutina diaria. Un crucero temático ofrece además la ventaja logística de reunir servicios con programación especializada, algo atractivo tanto para quien busca vacaciones temáticas como para comunidades que desean partidas largas, torneos y talleres con invitados.
