antonio miguel carmona
antonio miguel carmona
Inventarse un político
"Pactar" nos suena siempre a prostitución y a abolición de principios. A Carmona le ha salido de pronto una paronomasia en la segunda sílaba, que es Carmena, a la que todo el mundo ha votado. Dice ella que no es de Podemos, sino de los presentistas del Ahora. Me gusta mucho esta mujer. Si carece de la soberbia de Pablo Iglesias y no le hace caso, hay que dejarla hacer.
Aguirre en el país de los Soviets
El PP está en estado de estrés post-traumático: incredulidad, desconcierto, negación de la evidencia, estampida, críticas al liderazgo de Rajoy... nada fuera de lo normal tras perder el poder. Pero hay algo que resulta estrambótico. Se llama Esperanza Aguirre. Es la candidata más votada en la ciudad de Madrid: ganó las elecciones, pero perdió la alcaldía -salvo maniobras extrañas que preferimos no conjurar aquí-. Desde el 24M, Aguirre ha entrado en un bucle loco y extraño.
De Sánchez y el llanero solitario
El 24-M es un Rubicón que el liderazgo de Pedro Sánchez pasará o no en función de cómo se lean los resultados. Su equipo confía en mantener la segunda posición del tablero, pero también son conscientes de que eso no les bastará para calmar la ansiedad de algunos cuadros dirigentes. De ahí que aspiren a ser primera fuerza en Extremadura, Asturias y quizá Canarias, y a mantener la segunda posición con posibilidades de gobiernos de coalición en Castilla-La Mancha, Aragón, Baleares y Valencia. Más allá de la dirección federal, los pronósticos no son tan halagüeños.