El poeta español fue condenado a muerte por el régimen franquista, pero murió en la cárcel enfermo de tuberculosis en condiciones lamentables e infrahumanas.
El hermano del poeta relata las condiciones inhumanas que padeció, entre "cien hombres tendidos quitándose las puses con trapos sucios", y la indiferencia de las instituciones.
Es bien conocida la actividad que como poeta desarrolló Hernández en los frentes republicanos durante la Guerra de España, pero se sabe poco de sus crónicas periodísticas.