El fiscal general del Estado está más preocupado por la prensa que por los corruptos

El fiscal general del Estado está más preocupado por la prensa que por los corruptos

José Manuel Maza ha hecho alarde de una prepotencia asombrosa, dadas las circunstancias.

EFE

La prensa tiene la culpa. Al fiscal general del Estado, José Manuel Maza, le preocupan más las filtraciones del sumario a los periodistas, que las filtraciones que una magistrada y un miembro del Gobierno hacen a los corruptos, alertándoles de que están siendo investigados.

Este es el resumen de la comparecencia del magistrado Maza ante la comisión de Justicia en el Congreso para explicar el "caso Moix", el fiscal jefe Anticorrupción que en solo 77 días ha batido récords arrastrando la independencia de la Fiscalía por el suelo.

Los portavoces de los grupos, excepto el del PP, le han preguntado si conocía de antemano que Moix era el fiscal preferido por Ignacio González y Zaplana, según desvelan las grabaciones; sobre los intentos de relevar a los fiscales incómodos del caso Lezo y del 3% en Cataluña; y si iba a desvelar quién es la magistrada 'chivata' y el miembro del Gobierno que advierte a la familia de González de que están siendo investigados.

Haciendo alarde de una prepotencia asombrosa, Maza ha tratado a sus señorías como si fueran lelos.

En lugar de encarar las respuestas de frente, el fiscal general del Estado se ha agarrado al guión del PP, preparado para desviar la atención sobre la gravedad de las filtraciones de "partes parciales" del sumario que está publicando la prensa. Aunque ha reconocido sin problemas y como si fuese lo más normal del mundo, que sabía que Moix era el preferido de los investigados por corrupción porque habían coincidido en puestos institucionales.

Haciendo alarde de una prepotencia asombrosa, dada la situación, ha tratado a sus señorías como si fueran lelos por asumir "las interpretaciones y conjeturas" que leen en medios de dudosa calidad.

"Está tratando de desviar la atención. Lo grave es el contenido de las grabaciones, no tanto quienes las han filtrado, que son unos intermediarios", apunta Ignacio Prendes, portavoz de Ciudadanos, quien ha reprochado al fiscal que ponga "tanto empeño en proteger a los corruptos".

Durante toda la comparecencia ha sobrevolado la incógnita sobre la identidad de la magistrada 'amiga' que avisó al presidente de La Razón de que los investigados tenían los teléfonos pinchado, a la que la UCO califica de "conocida" jueza. Un dato importantísimo, según los portavoces. ¿Por qué la fiscalía no lo investiga? Según Maza porque está bajo secreto de sumario y corresponde al juez Velasco abrir un expediente. Se lo preguntamos directamente: ¿Por qué le preocupan más las filtraciones a la prensa que a los corruptos? "También estoy muy preocupado por las filtraciones a los corruptos pero desde la Fiscalía no puedo hacer nada".

El fiscal se ha despedido con un irónico "no les voy a cansar más, que habrán tenido un día muy duro" y ha exigido a los diputados "cambios procesales".

Una afirmación que Juan Carlos Campo, portavoz de Justicia del PSOE, cuestiona: "La Fiscalía puede promover al investigación. El fiscal es el primer encargado de hacer las averiguaciones". Versión que comparte el portavoz de Ciudadanos y que ha llevado también a Irene Montero, portavoz de Podemos, a reflexionar: "Si soy el fiscal jefe anticorrupción o el fiscal del caso Lezo y escucho unas grabaciones en las que se habla de que es una magistrada amiga la que avisa, lo normal es que queramos saber quién es esa magistrada".

Montero ha sido quien ha retado al fiscal general a tomar medidas contra las informaciones que él considera falsas. Maza ha rechazado la provocación con el argumento de que ni tan siquiera son noticias, porque lo publicado no tiene credibilidad. Aunque, por arte de magia, minutos después la denostada prensa recuperaba su prestigio porque gracias a ella, el fiscal Maza aseguraba que los ciudadanos están informados sobre la lucha de la Fiscalía contra la corrupción.

El fiscal, con un irónico "no les voy a cansar más, que habrán tenido un día muy duro", se ha despedido dándose el gusto de exigir a los diputados "cambios procesales" para poder asumir la investigación de las filtraciones a la prensa.