Oskar Matute (EH Bildu): "Si de nosotros depende, PP y Vox, o Vox y PP, porque el orden de los factores no altera el fascismo, no van a gobernar"
El diputado de EH Bildu y portavoz de Alternatiba atiende a El HuffPost en la última semana de actividad parlamentaria en el Congreso antes del parón navideño.
Durante varios años seguidos, la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP) le ha nominado al Premio Emilio Castelar al Mejor Orador del Congreso, pero hasta ahora se ha quedado a las puertas; la última vez, esta misma semana. Horas antes de ver cómo le arrebataba el galardón la diputada del Partido Popular Cayetana Álvarez de Toledo, a quien reconoce como buena oradora, Oskar Matute (Barakaldo, 1972) citaba en el Parlamento a "un extremeño universal", Robe Iniesta, mientras interpelaba a la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez. "Para algunos, la vida es cabalgar un camino empedrado de horas, minutos y segundos", recordaba el diputado de EH Bildu. Sobre vivienda, la sentencia al fiscal general del Estado, la unidad de la izquierda y la estabilidad del Gobierno, entre otras cosas, habló también con El HuffPost este martes. Si hubiera ganado el premio, por cierto, se lo habría dedicado a Isabel Díaz Ayuso, bromea.
- PREGUNTA: ¿Crees, como dijo Gabriel Rufián hace unas semanas, que la vivienda puede acabar con el Gobierno? El PSOE ha reiterado durante los últimos meses que la vivienda es el gran tema de la legislatura y, sin embargo, los precios no paran de subir. ¿Puede acabar la vivienda con el Gobierno?
RESPUESTA: La vivienda puede acabar no ya con este Gobierno, sino con cualquier gobierno. O debería, puesto que es el principal problema de la ciudadanía. Estamos hablando de un derecho vital. Sin garantizar el derecho a la vivienda, no puedes optar al desarrollo de una vida digna; si no tienes dónde morar, dónde cobijarte en cualquier circunstancia, difícilmente vas a poder desarrollar un proyecto vital que te lleve a tener un trabajo en el que poder desempeñarte con dignidad y solvencia, a tener una salud mental que te lleve a poder tener la vida que deseas y no la que te impongan los medicamentos...
El derecho a la vivienda es mucho más que las cuatro paredes y el techo que supone. Es el punto de partida para desarrollar un proyecto vital en términos emancipatorios. Es normal que un problema como ese pueda llevarse por delante cualquier gobierno. Pero tampoco es justo que se impute la inacción o la falta de resultados a este Gobierno o a la ley de Vivienda que ERC, EH Bildu, entonces Unidas Podemos y el PSOE aprobamos. Las competencias para poder construir vivienda, para que el porcentaje de vivienda pública sea mayor, para que las viviendas que se construyen con dinero de todos no pasen nunca al circuito privado de la especulación... Todo eso lo pueden hacer las comunidades autónomas, y ahí cada uno tendría que ver quién gobierna en su comunidad autónoma. En el mercado de la vivienda, la inacción no es involuntaria, es premeditada; y lo es porque hablamos de un sector que mueve miles y miles de millones en el Estado español y en todo el mundo, y que lo componen grandes empresas.
Hay pocos gobiernos y pocas formaciones que se atrevan a hacer políticas que les digan que sus beneficios tienen que estar limitados, que su acción, en tanto que convenida con el poder público, con dinero público, tiene que cumplir unos parámetros de función social o de beneficio social; y que, por tanto, el beneficio económico tiene que estar contenido y supeditado a ese beneficio social. Eso no les gusta generalmente a los constructores y, entonces, hay muy pocos partidos que se atrevan a decirlo. Pueblo a pueblo, comunidad autónoma a comunidad autónoma, viendo los colores de quienes gobiernan podría verse quién se ha atrevido a hacer cosas y quién no. No me equivoco si digo que nosotros, EH Bildu, estamos entre los que se atreven, pero no somos muchos.
- PREGUNTA: Si ya antes era difícil, después del anuncio de Junts de que ya no apoyarán nada que presente el Gobierno, uno se plantea si realmente el Parlamento tiene capacidad de legislar. Esta semana, por ejemplo, habéis debatido la Proposición de Ley Orgánica de Garantía del Plurilingüismo y de los Derechos Lingüísticos de la Ciudadanía con ERC, PNV, Compromís, BNG, Comuns, Més per Mallorca... Y no es descabellado pensar: 'Bueno, da igual, porque si no está Junts ya nada saldrá'. ¿Hay capacidad real para legislar en estos momentos?
RESPUESTA: Es complicado... Muchas veces vienes hasta aquí [Madrid], en mi caso desde Vizcaya, con la sensación de que la semana va a tener espacios e hitos de trabajo y acaban saltando por los aires porque estallan no sé cuántos escándalos. Y en los últimos meses tienen que ver mucho con la corrupción, que curiosamente es la que no descabalga gobiernos nunca. Mariano Rajoy ganó después de la sentencia contra el PP, de los papeles de Bárcenas, el M. Rajoy y demás. Lo digo por poner las cosas en perspectiva porque a veces tenemos memoria de pez y nos olvidamos de lo que pasó ayer. Pero es muy curioso lo que dices porque creo que obliga a que la gente por lo menos entienda algo: se equivocó todo aquel o aquella que, para dar fuerza, aire o velocidad al Gobierno resultante de las últimas elecciones, le otorgó todos los calificativos más bellos, por ejemplo, el de progresista.
No ha habido nunca una mayoría progresista. Ha habido una mayoría plurinacional, pero nunca fue una mayoría progresista. Junts no es una organización de izquierdas y el PNV tampoco, y ambas son imprescindibles, junto con las otras, para sostener al Gobierno. De hecho, se decía algo que era más acertado, que se necesitaba el apoyo de todos, en todo momento y para todas las cosas. Esa es la verdad. ¿Qué ha pasado? Que eso se ha quebrado. Eso me lleva a una reflexión que tiene que ver con echar la mirada atrás. Yo me acuerdo de dos hitos en la legislatura pasada, en la que Unidas Podemos estaba en el Gobierno y no Sumar, que marcaron mucha atención mediática en el espacio de las izquierdas. Una tenía que ver con la ley de Vivienda. Nosotros, en la valoración que hicimos de esa ley, que seguimos defendiendo, aunque sabemos que no avanza todo lo que debería, era precisamente eso: si ahora que tenemos mayoría de izquierdas no generamos un espacio de iniciativa con la vivienda, estamos perdiendo tiempo y quién sabe si no una generación entera, hasta que pueda estar la izquierda en su pluralidad en condiciones de tener mayoría absoluta. Y el otro elemento tiene que ver con la reforma laboral, que ERC y EH Bildu no avalamos, y la explicación troncal era esa. No decimos que lo que se está haciendo sea nocivo. Es más, podemos decir que está bien lo que viene.
El problema es todo lo que no viene pudiendo venir, y si no viene ahora, ¿cuándo? Si no lo hacemos nosotros, ¿quién? Esa era la circunstancia que creo que no se supo ver. Nosotros desde EH Bildu empezábamos a intuirlo y decíamos: 'Ojo, sostener a este Gobierno se puede hacer... Pero no con mimbres de izquierda'. Y si no lo haces con mimbres de izquierda, no vas a poder hacer todo aquello que te gustaría, y ahora es el momento porque además da sentido de utilidad al voto de la gente que elige a la izquierda no solo por un sentimiento utópico e idealista, sino porque quiere que se resuelvan los problemas.
- PREGUNTA: ¿Tiene alguna línea roja EH Bildu a la hora de seguir apoyando a este Gobierno? Mencionabas la corrupción de estos últimos meses. ¿Hay algo que pueda hacer pensar a EH Bildu que ya ha llegado el momento de convocar elecciones?
RESPUESTA: Nosotros en política intentamos operar sin líneas rojas, no para este caso en concreto sino en general. Si uno ve la evolución que ha tenido la izquierda abertzale, si hubiera habido líneas rojas habría sido difícil hacer lo que en su día se llamó el viraje del transatlántico y generar el frente amplio que ahora se llama EH Bildu. No operamos con líneas rojas, pero sí con coherencia. Nosotros hemos señalado que la corrupción en el Estado español es sistémica, no nos cabe ninguna duda, la han tenido un montón de formaciones, y parece que es una práctica muy ligada a la manera de entender la política por las élites y a la manera de entender la funcionalidad de los políticos por esas élites económicas a las que nadie vota, pero que de alguna manera nunca ven peligrar su estatus de privilegio y de poder.
Lo que sí hemos señalado es que no podemos encontrarnos con un partido dopado, que concurra a las elecciones en términos de ventaja porque tiene una financiación irregular que los demás no tienen. Por lo tanto, ahí sí diríamos que esto no tiene ningún sentido porque es desleal, deshonesto y no obedece a ninguna lógica de fortalecimiento de derechos sino de mera supervivencia. No creemos que ese sea el caso que se está dando ahora, o por lo menos nadie nos ha podido demostrar que ese caso se esté dando. También vemos las instrucciones judiciales y algunas nos asombran bastante, aún conociendo sus deliberaciones y la manera de proceder de la UCO y otras entidades, no dejan de sorprender y a veces casi de sonrojar. Tampoco creo que esto dependa de que un partido diga hasta aquí llego y me bajo. Si se da esa financiación irregular, no puede sostenerlo aquel que tiene el foco encima.
- PREGUNTA: ¿Cómo asisten a todas las denuncias por acoso sexual que están saliendo estos días en el PSOE?
RESPUESTA: Hay quienes denostan o vilipendian al feminismo porque este movimiento, imprescindible en la búsqueda de una sociedad digna, señala con claridad un mundo desgraciadamente aún más regido por la testosterona que la neurona. Las vergüenzas y obscenidades que las mujeres sufren en un mundo regido por hombres no desaparecen ocultando a quien se atreve a alzar la voz. Estos días, por desgracia, vemos la razón de esas denuncias y la vigencia del feminismo en pos de un mundo de todas y todas en pie de igualdad.
- PREGUNTA: La última campaña de las elecciones vascas fue bastante sorpresiva porque, más allá de algún ruido que se generó sobre todo desde fuera, estuvo centrada de verdad en el debate acerca de las diferencias políticas entre unos y otros. Aquí, Isabel Díaz Ayuso volvió a referirse a EH Bildu como ETA. ¿Hasta cuándo creen que seguirá usando la derecha el comodín del terrorismo? ¿Por qué en el País Vasco parece que es algo superado, pero en Madrid, no?
RESPUESTA: Lo de Isabel Díaz Ayuso con ETA y EH Bildu es obsesión, es casi un elemento patologizado. La manera de verlo diferente tiene que ver con que para nosotros esa etapa no tiene un sentido utilitarista en la acción política diaria. Para nosotros es un recuerdo a veces doloroso y desde luego muy presente en la toda la gente que transitamos todo ese tiempo de actividad armada y de violencia de ETA y de las violencias del Estado, detenciones, torturas, represión, cierre de medios, encarcelamientos sin pruebas... Todo un proceso que no dejó un poso dulce en nuestro pueblo. Euskal Herria quiere mirar hacia adelante sin olvidar el pasado.
Por eso siempre señalamos que respeto absoluto a todas las víctimas de todas las violencias: verdad, justicia y reparación para todas las víctimas, también para las de ETA, pero hay que mirar hacia adelante. Y hay otra gente fuera de ahí, probablemente porque no lo han vivido con tanta intensidad ya que no era el escenario donde se desarrollaba en mayor proporción y porque no era el lugar donde nacía el propio conflicto, que todavía se manejan con la frivolidad de utilizarlo para fines político-electorales. No me gusta, pero entiendo que no van a dejar de hacerlo. Muestran su frivolidad más absoluta y su vacío argumental a la hora de resolver los problemas de la ciudadanía, pero claro, estoy hablando de Isabel Díaz Ayuso, no de Einstein.
- PREGUNTA: No sé si viste la polémica que han suscitado unas palabras de Inés Hernand en Operación Triunfo por decir que "la izquierda abertzale era pacifista". ¿Cómo se puede transformar el imaginario para convencer a la gente de que es algo superado? Es más, tanto en Euskadi como en Navarra, EH Bildu no para de crecer, lo que demuestra que ahí no hay ese debate.
RESPUESTA: No paramos de crecer y ellos no paran de disminuir, y es bonito, es bonito que eso pase. Yo se lo recomiendo. Los madrileños en lugar de pensar solo en las cervezas, que no digo que estén mal, podían pensar también en esa posibilidad, en ese sueño en el que el PP siga menguando paulatinamente mientras una fuerza que se erige como un frente popular de izquierdas, que tiene como objetivo principal dotar más derechos y libertad a su pueblo, sigue disparándose en las encuestas. Sería un ejercicio a probar. El de Ayuso ya lo han probado, así que este podría estar bien.
Yo lo de Inés Hernand no lo vi en directo, pero sí el revuelo en redes, porque vi que volvían a sacar un vídeo mío de hace un montón de tiempo para avalar la tesis o la reflexión de Inés Hernand. Hay algo que mucha gente olvida de manera interesada: la izquierda vasca, y la izquierda abertzale era una parte fundamental de la izquierda vasca, ha tenido compromisos históricos en términos de actividad social muy importantes, tanto en Euskal Herria como fuera de ella. Es muy difícil entender, por ejemplo, la solidaridad que se dio en Europa para con el Frente Sandinista para la Liberación Nacional o para con el Frente Farabundo Martí de Liberación Nacional, u otros casos en América Latina, sin entender que hubo un compromiso muy importante en Euskal Herria. Pero en esa misma Euskal Herria, que es capaz de apoyar esos procesos insurgentes en América Latina, hay gente que levanta el mayor movimiento de desobediencia civil contra un Estado en términos de insumisión al Ejército y al servicio militar obligatorio. Barríamos en números al resto de comunidades autónomas en proporción de gente llamada a filas y gente que se declaraba insumisa. No querer ir al Ejército para no querer manejar armas te hace, por lo menos, un ciudadano menos peligroso cuando pasa a tu lado.
De todas maneras, vivimos un tiempo de involución que es muy importante, no tanto por lo que le ha pasado a ella [Hernand], que es otro ejemplo más. A mí me asusta bastante cuando veo a alineados o descerebrados decir aquello de que con Franco se vivía mejor. Esa gente que dice ese tipo de barbaridades, de estupideces, salvo que ha nacido de alguna probeta, han nacido del vientre de alguna madre. Tendrían que ver lo que hacía la dictadura para con el papel de la mujer y los derechos que le reservaban.
- PREGUNTA: Ayuso hizo ese discurso un domingo y el lunes Europol y Policía Nacional comunicaron que habían detenido a la célula española del grupo terrorista neonazi The Base. Todos los informes de seguridad e inteligencia en Europa y otros países alertan en los últimos tiempos del incremento del terrorismo de extrema derecha. Esta célula de The Base preparaba atentados inminentes.
RESPUESTA: Estamos viviendo un tiempo duro, y no hay que bajar la guardia. Desde luego, la izquierda soberanista vasca de EH Bildu, junto con el tejido social, está dispuesta a decirle al fascismo que por nuestro pueblo no van a pasar. Es un llamamiento internacional a plantar cara y poner freno a esta deriva. Es muy paradójico que nos pasemos más tiempo determinando si algunas lecturas políticas son acertadas o no, como la que hemos comentado hace un momento, o si determinadas actuaciones (me da igual un piquete, una concentración, una muestra de rechazo clara en una universidad porque viene un agitador ultraderechista a intentar hacer proselitismo de su negocio...) se conviertan casi en una especie de fenómeno a analizar, a diseccionar, mientras a la vez lo que vemos es que la extrema derecha está adquiriendo no ya expresiones, sino formas de organización que tienen que ver con lo paramilitar, con el ejercicio activo de la violencia. Has hablado de The Base, pero también hay cosas como Núcleo Nacional que ojito, ya no hablamos de cuatro nostálgicos que van el 20 de noviembre a la plaza de Oriente con la bandera. Estamos hablando de gente que quiere hacer cosas bastante peligrosas, o que dice querer hacer ese tipo de cosas.
- PREGUNTA: Hablas de EH Bildu como un ejemplo de frente amplio. ¿Es extrapolable a la izquierda española?
RESPUESTA: Debería poder extrapolarse y aplicarse en todos los lugares, atendiendo a la realidad de cada uno. Al final un frente amplio no es más que anteponer lo que nos une frente a lo que nos separa desde una lógica según la cual primero está el país y luego, el partido. Y también con una fuerte voluntad de no convertirnos únicamente en el refugio de los sectores más concienciados de nuestra sociedad, sino de buscar la opción de articular amplias mayorías. Arnaldo Otegi utiliza mucho una expresión de los tupamaros, del Frente Amplio de Uruguay, que es: no estamos aquí para contentar a minorías exquisitas, sino para satisfacer a mayorías amplias. Pero conviene también ser honesto. No se puede construir un frente amplio sin una base militante y organizada fuerte, porque esos son proyectos demasiado sometidos al cariño y el desprecio de las corrientes de opinión, y la inmensa mayoría de los medios de comunicación no son de información, sino de formación de opinión. Necesitas, por tanto, tener un arraigo militante, con una estructura potente. En EH Bildu la tenemos y eso lo hace más fácil. Tenemos presencia en todos los pueblos de Euskal Herria, con militancia en todos ellos, tenemos además una articulación estrecha con los movimientos sociales o buena parte de ellos, y eso hace que puedas contar los brazos por decenas de miles. A partir de ahí, construyes. Ese es el camino. Si es una cuestión de tiempo, pues tendrán que empezar a andar, si así lo desean.
- PREGUNTA: ¿De qué manera podría participar EH Bildu en algún frente amplio ese tipo, o llegar a acuerdos como se hizo en Francia, de manera que en algunos lugares se presente únicamente la formación con más opciones y las demás apoyen? No sé si está ya en debate.
RESPUESTA: Es una cuestión que ha podido aparecer, pero no en conversaciones formales. No obedece en ningún caso a un guion. Yo quiero ser sincero: igual que le doy un bajonazo a alguna gente, pero no hay unas conversaciones de cocina, secretas, que vayan a alumbrar mañana no sé qué idea que pueda ilusionar a alguna gente, no las hay. Desde EH Bildu pretendemos siempre no generar falsas expectativas ni engañar a nadie, decimos la verdad siempre, guste o no guste. Nuestro ámbito de actuación es Euskal Herria, nosotros contemplamos nuestra presencia en nuestro país, y nuestro país es Euskal Herria. A partir de ahí, concurrimos a elecciones en espacios que trascienden a Euskal Herria, el propio Congreso o el Senado, y el Parlamento Europeo, pero lo hacemos porque ahí se discuten y aprueban decisiones que afectan a la vida de los vascos y de las vascas. Con esa misión y esa voluntad vamos. Nosotros no somos quién para decidir ni cuáles ni tienen que ser las características ni cuál tiene que ser el desarrollo presente y futuro de, no sé, Murcia, Illes Balears o de Extremadura. Ahora bien, desde nuestra visión, estamos dispuestos a colaborar, estrechar relaciones, buscar iniciativas conjuntas. Eso no lo hemos negado nunca. De hecho, la dirección de EH Bildu, desde finales de agosto hasta mediados de septiembre, ha hecho una ronda para reunirse con más de catorce organizaciones políticas del Estado español. A todos les hemos transmitido lo mismo, en aquellos terrenos en los que podamos encontrar fórmulas colaborativas, perfecto. Pero yo no me voy a presentar ni por Ávila, ni por Teruel, ni por Cáceres.
- PREGUNTA: Alguien decía el otro día que apostaría por una candidatura liderada por ti y por Gabriel Rufián.
RESPUESTA: Por Gabriel no voy a hablar, pero desde luego a mí me sobrevaloran y yo no me quiero tan mal. No se van a dar las circunstancias.
- PREGUNTA: En unas futuras elecciones, ¿todo vale a la hora de pactar entre la izquierda si es para frenar a la extrema derecha?
RESPUESTA: No, lo que hay que ser honesto. A mí me hace mucha gracia que ahora haya gente que haya descubierto que a veces en política funciona la opción del mal menor. Pues claro que funciona, y ha funcionado en todas las tendencias políticas y en todas las líneas de pensamiento político de este país, porque es una de las maneras de funcionar. No digo que sea la mejor, pero es una que sobre todo se establece en términos de resistencia. Nosotros lo hemos dicho con absoluta claridad. Si de nosotros y nosotras depende, el PP y Vox, Vox y el PP, porque el orden de los factores no altera el fascismo, no van a gobernar.
¿Significa eso que quien gobierne ya cuenta con todos nuestros parabienes, nuestros aplausos más excelsos y carantoñas más lindas? Pues no. Si no nos gusta lo que hacen, lo señalaremos, no lo apoyaremos... Pero siendo conscientes de que PP y Vox, Vox y PP, vienen con un programa de involución democrática que trae recortes competenciales, recentralización de elementos tan sensibles como la sanidad y la educación, ataque directo a lo que somos como vascos y vascas y lo que aspiramos a ser... No solo nos jugamos nuestro horizonte, nos jugamos incluso que se pudiera garantizar nuestro derecho a ser, existir y, algún día, decidir. Mientras estas dos formaciones políticas estén dispuestas a gobernar y dicen que nos quieren ilegalizar, y si lo primero es el pueblo y luego el partido, pues toca cerrar filas.
- PREGUNTA: Entiendo que no estás de acuerdo con este sector de la izquierda que cree que gobierno del PP y Vox volvería a movilizar las calles.
RESPUESTA: Ese es el cuanto peor, mejor. Quien piense eso a lo mejor lo hace con un conocimiento exhaustivo de la sociedad española, pero a mí sinceramente me cuesta creerlo. Franco murió en la cama... No sé. La réplica toma del Palacio de Invierno todavía no ha encontrado un huequillo el domingo para poder hacerla y saltarse los vermuts. Me cuesta creer, ya poniéndome en serio y sin querer ofender a nadie, que alguien plantee que esa sea una posibilidad digna. ¿Cuánto es el sacrificio que estás dispuesto a soportar para que la gente se levante? ¿Que se carguen las pensiones dignas? ¿Volver a los tiempos donde la esclavitud sea la norma? ¿Queremos volver a un escenario donde los barrios sean una especie de guetos para que viva hacinada la clase obrera mientras la ciudad es un escaparate para inversores o coches de Fórmula 1? ¿Queremos realmente eso? Yo creo que no.
Lo que hay que hacer es no abandonar la calle cuando tienes los gobiernos. Si ahora la izquierda ha perdido fuelle en el Estado español con respecto a la capacidad movilizatoria que tenía antes del 15M y que lo desencadenó, igual es porque cuando se ha gobernado, se ha abandonado la calle. Y se decidió que la calle no podía convertirse en otro elemento de crispación o cuestionamiento del gobierno, que ya bastantes dificultades tenían. Error. Una calle que se moviliza, aunque sea para criticarte a ti, pero bajo parámetros de izquierda, es una calle que no puede tomar la extrema derecha. Probablemente ahora estemos viviendo estos resultados. En EH Bildu siguen ahí los pensionistas erre que erre cada lunes, el movimiento feminista goza de buena salud, el movimiento sindical también. A veces nos señalan como corresponsables de algunas decisiones que no les gustan, pero es que eso es mucho mejor que narcotizar a toda una sociedad para que no haya ruido y no moleste porque habrá quien lo aproveche.
- PREGUNTA: Hablando de esto, en Euskadi y Navarra hay un sector de la juventud, la GKS y el Movimiento Socialista, que os echan en cara a EH Bildu eso, el abandonar la calle por las instituciones. ¿Hay una disputa real en la izquierda vasca?
RESPUESTA: Lo que ahora es el Movimiento Socialista en todo el Estado español tiene su embrión en GKS, la Gazte Koordinadora Sozialista, un grupo que jamás estuvo en EH Bildu. Era un grupo que venía del sindicato estudiantil mayoritario en Euskal Herria, y ahí una parte de gente decide que la apuesta por construir Bildu primero y luego Euskal Herria Bildu era una apuesta que no les satisfacía porque reclamaban aún la pervivencia del modelo Batasuna. Es gente que nunca ha formado parte de EH Bildu y, por tanto, esos análisis que dicen que hay personas que se están yendo de Bildu adolecen de rigor. Uno de los elementos más característicos de su posición siempre ha sido la de criticar a EH Bildu, la de usarnos como espejo en el que reflejar sus críticas. ¿Qué dicen? Básicamente plantean un debate que en Euskal Herria ya se dio en los años 70. En esa época, en el calor de la lucha antifranquista y fundamentalmente en ETA, ya hubo un debate entre sectores más abertzales y sectores más rupturistas influidos tanto por la revolución cultural de Mao como por mayo del 68, que planteaban que había que ser más rupturista en lo revolucionario y lo abertzale tenía que desaparecer porque era más blando.
A mí me parece legítimo que hagan su camino, nunca he arremetido contra ellos en términos de adversarios o enemigos. Se mueven en el campo de la izquierda, para mí una izquierda harto ortodoxa en algunas cuestiones que hace una lectura equivocada de tiempos, porque, desde una proletarización total de todas las esferas de la vida, ignora todo lo que las sociedades occidentales, también la vasca, han ido construyendo desde la década de los 80, que era un socialismo multidimensional, poner en pie de igualdad todas las luchas que surgían, no supeditar unas a otras. Y, sin embargo, yo en ellos y ellas observo una especie de lógica de que el poder proletario, la lucha socialista, es la lucha principal que de alguna manera tiene que nutrirse de todas las luchas. Eso es una enmienda, yo creo, a lo que precisamente ha hecho que en Euskal Herria gocemos de tan buena salud, que era que todas las luchas emancipatorias, si realmente lo son, tienen que estar en pie de igualdad, y que así se construye un socialismo multidimensional que nos hace llegar a mucha más gente que la que estrictamente se mueve en términos de lectura proletaria. Yo sí que creo que la lucha de clases se da también, igual que ellos, y creo que van ganando los de siempre todavía, pero no tengo muy claro, viniendo y viviendo en un barrio obrero, que una lectura exclusivamente vinculada al mundo del trabajo, a la lucha obrera y a la lucha de clases, me acerque a más sectores que, sin embargo, tienen una alta intensidad de impacto cuando hablamos de la transición ecológica, cambio climático, o la desigualdad evidente entre mujeres y hombres, el patriarcado, o cuando hablamos de otras dimensiones. Les podrán gustar más o menos las proclamas con las que tomamos las calles, pero seguimos tomando las calles por decenas de miles. Eso no nos impide seguir creciendo electoralmente.
Sabemos jugar con tener pies en las calles y pies en las instituciones, y probablemente ellos también hagan esa reflexión algún día y no les gustará que nadie les llame revisionistas o traidores por haber decidido dar el salto a las instituciones, aunque sea para impugnarlas. Estarán en su derecho y yo no les llamaré revisionistas, traidores ni burgueses socialdemócratas.
- PREGUNTA: Comentabas antes que cada vez más jóvenes, sobre todo hombres, tienen un discurso de que la dictadura no era tan mala. ¿La conmemoración de los 50 años de la muerte de Francisco Franco que ha organizado el Gobierno este año es una solución para educar o enseñar lo que fue aquello? Hace poco estuvimos con tres represaliados del franquismo que fueron torturados en la Puerta del Sol y nos decían que nadie había hablado con ellos para esta efeméride.
RESPUESTA: No, no lo es. El franquismo fue un régimen no democrático que acabó con un régimen democrático a través de una dictadura de 40 años, de decenas de miles de desaparecidos en cunetas, con una guerra civil cruenta fruto de su alzamiento fascista y con una serie de ataques brutales a las libertades. Si a alguien le parece que todo esto es literatura y dice que construyó muchos pantanos, la seguridad social, las viviendas con el yugo y las flechas de la Falange... Si hay gente que dice eso, habría que decirle que lo que están diciendo ahora, no podrían decirlo en un sentido contrario en ese régimen que añora. Alguien puede salir a decir 'Perro Sanxe hijo de fruta', que diría aquella, pero no podría decir jamás algo así de los gobernantes en el régimen que añora. Enfrentaría años de cárcel, si no desaparición o muerte. Hay mucho valiente también en el teclado, mucho campeón de MMA delante de un teclado que luego resulta que pesa 40 kilos y mojado. Es un debate irresuelto porque la Transición fue una especie de pacto de silencio.
La gente de EH Bildu protestamos hace poco por la presencia del actual rey de España en Gernika en un homenaje en el que el Gobierno de Alemania vino a pedir perdón por los bombardeos de la Legión Cóndor de los nazis. Protestamos por la presencia del sucesor de Franco, porque la Monarquía de los Borbones está aquí porque Franco así lo decidió. Si no le explicamos eso a la gente, seguirán pensando que tenemos una Monarquía naif, con una reina que nos cae un poco bien, un rey que no sabemos si nos cae mal o bien y un rey emérito que nos cae mal pero que tenía su puntito. Explicar eso es un esfuerzo que alguien tendría que hacer para que luego no haya gente que luego caiga en estas versiones edulcoradas de lo que fue el franquismo.
- PREGUNTA: ¿Por qué da tanto miedo pedir perdón? ¿Por qué Alemania puede hacerlo en Gernika, pero nosotros no?
RESPUESTA: Obedece a una lectura de tiempos y de cómo ellos [Alemania] enfrentaron su etapa posterior al nazismo. Para mí ni siquiera es lo más importante lo del perdón. Estoy un poco cansado de lo del perdón, porque lo hemos oído en muchas direcciones. Yo lo único que pido es que no ignores la realidad, no dañes a quienes se sienten heridos o dañados y no estés con tu presencia en algún lugar en el que, si estás, se te pide que hagas algo concreto. Y si no lo vas a hacer, no vayas y no pasa nada. No tienes por qué irte hasta Santiago en peregrinación, no se te va a pedir eso. Pero si no eres capaz de hacer lo que te piden aquellos que hoy son honrados por el Gobierno de Alemania, pues no vayas. Sería una manera de mostrar un cierto respeto.
- PREGUNTA: RTVE ha decidido no presentarse a Eurovisión por la participación de Israel. Gracias a este tema, ha vuelto a hablarse de Palestina. Parece que después del supuesto acuerdo de paz de Donald Trump, se ha abandonado un poco el tema, aunque Israel siga matando palestinos día tras día.
RESPUESTA: No creo que se haya abandonado. No creo que podamos imputar este silencio a toda la gente que siente lo que está pasando en Palestina y que en la medida de sus posibilidades hizo algo porque el genocidio que comete el Estado genocida de Israel y el Gobierno de Benjamin Netanyahu no quedara tapado por un manto de silencio. Vivimos una realidad de la que ya hablaba Zygmunt Bauman, con una sociedad líquida, donde todo lo que tiene foco en un momento, deja de tenerlo en cuestión de segundos. Tiene más que ver con intereses económicos. Teniendo a Trump de presidente de la primera potencia militar mundial, es muy complicado que tú puedas sostener continuamente la dimensión pública.
Lo de Eurovisión, si acaso, tiene ese factor positivo, el hecho de que el Estado español haya decidido no acudir permite que se siga hablando de Palestina. El tema tiene que seguir estando en la agenda, porque a diferencia de Ucrania, en Palestina no parece que haya interés económico o geoestratégico, y por eso desde la modestia y la humildad de cada uno, tendremos que seguir alzando la voz para que no se olvide el genocidio sobre el pueblo palestino y para que Palestina tenga futuro, pueda ser una nación libre y reconocida en el mundo.