El avión acaba su vuelo de 1.000 kilómetros y encuentran a un polizón muy joven escondido en el tren de aterrizaje
Afortunadamente, la historia terminó bien.

Un niño de 13 años viajó de Kabul a Delhi escondido en el compartimento del tren de aterrizaje de un avión, según han informado las autoridades de la India. El menor fue hallado andando por la pista cerca de donde el avión había parado poco después de aterrizar, tal y como recoge la Fuerza de Seguridad Industrial Central de la India.
Cuando los agentes encontraron al niño le sometieron a un interrogatorio para conocer su origen y por qué había hecho tal acción, descubriendo que era originario de Kunduz, situado en el Norte de Afganistán, y que había viajado escondiéndose en el "tren de aterrizaje central trasero".
Junto con él, también hallaron un pequeño altavoz rojo. Tras hablar con él, el niño fue repatriado inmediatamente el mismo día que fue encontrado. Cabe destacar que la distancia entre ambos puntos es de unos 1.000 kilómetros y el vuelo tuvo una duración aproximada de una hora y medio.
Esta acción es más común de lo que se cree y a los que la hacen se les conoce como polizones. Según datos de la Administración Federal de Aviación, en 2019, más del 77% de las personas que intentaron viajar ilegalmente en una aeronave perdieron la vida.
Y es que, cuando el tren de aterrizaje se retrae, las personas que hay allí suelen morir aplastadas, pues no hay mucho espacio (la zona es más pequeña que el maletero de un coche). Además, cuando el vuelo coge una mayor altura, los niveles de oxígeno se reducen, provocando un riesgo para la salud de los polizones.
