España combate varios incendios mientras Galicia, con cinco activos, supera las 1.300 hectáreas quemadas
El más preocupante es el de Vilardevós, Ourense, donde se ha desplegado la UME. También se sigue de cerca la situación de los focos en Extremadura y Andalucía.

Galicia ha cerrado el domingo con una de las jornadas más críticas del verano en materia de incendios forestales. Los equipos de extinción trabajan en la extinción de cinco fuegos activos, tres en el localidad coruñesa de Ponteceso y dos en la provincia de Ourense, que han quemado ya más de 1.300 hectáreas, solo con los frentes abiertos. La virulencia de las llamas ha obligado al corte de carreteras, la evacuación de las playas y desplegar a la Unidad Militar de Emergencias.
Mientras tanto, Extremadura y Andalucía también combaten otros incendios declarados en las últimas horas, aunque con menor superficie afectada. El incendio más extenso de la semana sigue siendo el de Caminomorisco, Cáceres, con 2.660 hectáreas arrasadas. En Ávila, el fuego que ha devastado 2.200 hectáreas en una zona de alto valor natural ya está controlado.
UME desplegada en Ourense
La Xunta de Galicia ha desactivado a última hora del domingo el nivel 2 de emergencia en el incendio forestal de Vilardevós, al haberse reducido el riesgo en los núcleos habitados. Sin embargo, el fuego sigue aún activo, con tres focos iniciales que han quemado ya unas 570 hectáreas. Según ha detallado la conselleira de Medio Rural, María José Gómez, el incendio se encuentra estabilizado, pero aún requiere un operativo de envergadura: 4 técnicos, 33 agentes, 43 brigadas, 32 motobombas, 6 palas, 10 helicópteros, 10 aviones y apoyo de la Unidad Militar de Emergencias.
En Ponteceso siguen activos tres incendios, aunque uno de ellos, el de Cospindo, a última hora de este sábado se daba por estabilizado, tras arrasar con 200 hectáreas. A última hora del domingo, el de Brantuas sumaba 140 hectáreas y el de A Graña, que comenzó de madrugada, otras 100. Las llamas obligaron el sábado a desalojar a los bañistas de la playa de Balarés por una pista secundaria y este domingo se cortaron hasta tres carreteras para facilitar las labores de extinción. Todas fueron se reabrieron hacia las 21:00 horas.
Además, otro fuego declarado a las 12:31 en Vilar de Barrio, también en Ourense, en la parroquia de Rebordechao, ha calcinado unas 20 hectáreas. Se encuentra estabilizado. En el capítulo de incendios ya extinguidos en Galicia, destacan el de A Cañiza (Pontevedra), que ha afectado a 295 hectáreas y que se dio por apagado este domingo. También se ha sofocado un incendio en Porto do Son (A Coruña), con 28,3 hectáreas quemadas, y otro en Ribeira, que rozó el Parque Natural de las Dunas de Corrubedo.
Extremadura y Andalucía, en alerta
En Extremadura, el Plan Infoex ha intervenido esta semana en 31 incendios forestales que han dejado unas 2.779 hectáreas afectadas. El más reciente, aún activo, se declaró el domingo en Benquerencia de la Serena (Badajoz), en una zona de pastos. Allí trabajan ocho unidades de bomberos forestales, cuatro medios aéreos, maquinaria pesada, personal del Ministerio para la Transición Ecológica y efectivos de la Diputación de Badajoz. Sin embargo, el incendio más destructivo ha sido el declarado el 29 de julio en Caminomorisco (Cáceres), que ha arrasado 2.660 hectáreas.
En Andalucía, el Infoca ha estabilizado el incendio declarado el domingo por la tarde en un paraje de Cádiar (Granada), cerca de la pedanía de Yátor, en plena Alpujarra. En las labores de extinción han participado dos grupos de bomberos forestales, técnicos de operaciones, un agente de Medio Ambiente y cuatro medios aéreos, además de varias autobombas.
Por otro lado, el incendio declarado el lunes pasado en el Barranco de las Cinco Villas, al sur de Ávila, ha bajado a nivel 0 en el Índice de Gravedad Potencial. El fuego, que arrasó un paraje de alto valor ambiental, ha quedado controlado tras cinco días de trabajo intenso de más de 500 efectivos. También se han dado por extinguidos los incendios de Genera (Sevilla), Lepe (Huelva) y Riba-roja (València), todos ellos sin grandes efectos.
