Los incendios de 2025 se convierten en los peores de los últimos 20 años
Según el Sistema Europeo de Información sobre Incendios, hasta ahora el fuego ha arrasado 342.501 hectáreas. Siete veces más que en 2024.

Los incendios que están protagonizando este 2025 son los peores en los últimos 20 años. El tema que está protagonizando toda la actualidad nacional elevan sus consecuencias hasta prácticamente no encontrar precedentes en la historia reciente. Según el Sistema Europeo de Información sobre Incendios (EFFIS), el fuego habría arrasado un total de 342.501 hectáreas. Los peores datos registrados según el organismo fue en 2022 y en 2012, dos años que han sido sobrepasados por el actual en el drama incendiario.
Además, más de la mitad de esta superficie se habría calcinado en la última semana ya que el pasado jueves, las hectáreas afectadas por los fuegos que asolan a gran parte del país eran de 157.501. Llama la atención que los incendios, además de peores, cada vez son más recurrentes en el país. En el año 2012, un total de 189.376 hectáreas fueron abrasadas por las llamas; en 2022, ascendieron hasta las 306.555 y, ahora, muchos de los incendios que están abrasando los campos son los peores de la historia.
Concretamente, en la sierra de Culebra (Zamora), se encuentra la mayor tragedia de la historia que está latente en la península. Galicia, por otro lado, afronta su año con más incendios activo, esencialmente en Ourense, donde son muchos los pueblos que tienen que apagar ellos mismos los fuegos para que sus ganados y hogares no sean absorbidos por las llamas. "Muchos de los vecinos piensan que ya están irremediablemente arruinados ante todo lo que está pasando con las llamas", aseguraba uno de los vecinos a El HuffPost.
La comparativa con 2024 también es desoladora. En lo que llevamos de año, la superficie quemada es siete veces mayor a la del curso pasado. Sin embargo, la cantidad de incendios es la misma —un total de 219 de incendios—. Lo que, de nuevo, vuelve a poner encima de la mesa el aumento progresivo con el paso de los años particularmente en la gravedad y magnitud de los incendios. La crisis climática, el abandono de los campos, las numerosas lluvias de la primavera y el inusual calor de las últimas semanas son ingredientes que agravan constantemente la situación.
Ante este panorama, la polémica política sigue siendo latente entre el Gobierno y la oposición. El primero asegura que todos los medios a su alcance están a disposición de todas las comunidades autonómicas mientras que estas achacan al Ejecutivo que "busca culpables" mientras tienen las competencias forestales y la dirección y planificación de las operaciones antincendios.
